Efesios 5:22 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

²² Las esposas deben sujetarse a sus esposos, así como lo hacen con Cristo.

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Biblia Reina Valera 1960

²² Las casadas estén sujetas a sus propios maridos, como al Señor;

Biblia Nueva Traducción Viviente

²² Para las esposas, eso significa: sométase cada una a su marido como al Señor,

Biblia Católica (Latinoamericana)

²² Lo sean así las esposas a sus maridos, como al Señor.

La Biblia Textual 3a Edicion

²² Las casadas: A sus propios maridos,° como al Señor,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²² las mujeres a sus maridos como al Señor.

Efesios 5:22 Σταυροειδείς Αναφορές

Génesis 3:16

A la mujer le dijo: «Cuando tengas tus hijos, ¡haré que los tengas con muchos dolores! A pesar de todo, desearás tener hijos con tu esposo, y él será quien te domine».

Ester 1:20

Cuando se conozca la orden de Su Majestad en todo este gran reino, todas las mujeres respetarán a sus esposos, sean ricos o pobres.

Ester 1:22

envió cartas a todas las provincias del país. Las cartas fueron escritas en el idioma de cada provincia, y dejaban en claro que el esposo era el jefe de la familia, y que en la casa se debía hablar su idioma.

1 Corintios 14:34

las mujeres deben guardar silencio en las reuniones. No está permitido que ellas hablen; más bien, deben mostrarse respetuosas como dice la ley de Moisés.

Efesios 5:22

Las esposas deben sujetarse a sus esposos, así como lo hacen con Cristo.

Efesios 6:5

Esclavos y esclavas, obedezcan a los que aquí en la tierra son sus amos. Obedézcanlos con respeto, sinceridad, y de buena gana, como si estuvieran sirviendo a Cristo mismo.

Colosenses 3:1

Dios les dio nueva vida, pues los resucitó juntamente con Cristo. Por eso, dediquen toda su vida a hacer lo que a Dios le agrada. Piensen en las cosas del cielo, donde Cristo gobierna a la derecha de Dios. No piensen en las cosas de este mundo.

Colosenses 3:18

Ustedes, las esposas, deben sujetarse a sus esposos, pues es lo que se espera de ustedes como cristianas.

Tito 2:5

También deben enseñarles a pensar bien lo que van a hacer, y a ser dueñas de sí mismas, a atender bien a su familia y sujetarse a su esposo. Así nadie podrá hablar mal del mensaje de Dios.