por tanto, así dice Jehová el Señor: He aquí que yo pongo en Sión por cimiento una piedra, piedra probada, piedra angular preciosa de firmísimo asiento; y el que creyere no se apresurará.
Rut 3:18 - Biblia Version Moderna (1929) Y ésta dijo: Siéntate tranquila, hija mía, hasta que sepas como caerá la cosa; porque no descansará ese hombre hasta que haya acabado el asunto hoy. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Entonces Noemí dijo: Espérate, hija mía, hasta que sepas cómo se resuelve el asunto; porque aquel hombre no descansará hasta que concluya el asunto hoy. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Noemí le dijo: —Ten paciencia, hija mía, hasta que sepamos lo que pasa. El hombre no descansará hasta dejar resuelto el asunto hoy mismo. Biblia Católica (Latinoamericana) Noemí replicó: 'Quédate tranquila hasta que veas en qué termina esto, pues estoy segura de que él agotará todos los medios para llevarlo a buen fin hoy mismo. La Biblia Textual 3a Edicion Y ésta dijo: Descansa, hija mía, hasta que sepas como termina este asunto, porque el hombre no descansará hasta que concluya hoy mismo el asunto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Noemí le dijo: 'Estáte tranquila, hija mía, hasta saber en qué termina el asunto; porque ese hombre no descansará hasta darle cumplimiento hoy mismo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Noemí dijo: Reposa, hija mía, hasta que sepas cómo termina esto; porque aquel hombre no descansará hasta que concluya el asunto hoy. |
por tanto, así dice Jehová el Señor: He aquí que yo pongo en Sión por cimiento una piedra, piedra probada, piedra angular preciosa de firmísimo asiento; y el que creyere no se apresurará.
Porque para nada y en vano os ayudarán los Egipcios; por esto la he apellidado Rahab-hemsabet.
Dijo también: Estas seis medidas de cebada me ha dado, porque me dijo: No vuelvas con las manos vacías a tu suegra.
BOOZ pues subió a la puerta de la ciudad y se sentó allí: y he aquí al redentor de quien había hablado Booz, el cual iba pasando. Y él le dijo: Vuelve para acá; siéntate aquí, fulano. Y él volvió, y se sentó allí.