En todos los lugares donde he andado en medio de todos los hijos de Israel, ¿hablé una palabra siquiera a cualquier hombre de las tribus de Israel, de los que he mandado pastorear a mi pueblo de Israel, diciendo ¿Por qué no me habéis edificado una Casa de cedro?
¶Empero ¿habitará verdaderamente Dios sobre la tierra? He aquí que los cielos y los cielos de los cielos no te pueden abarcar, ¿cuánto menos esta Casa que yo acabo de edificar?
ZAYIN.- El Señor ha desechado su altar; ha aborrecido su Santuario: entregó en mano del enemigo los muros de los palacios de Sión: los paganos hicieron resonar su voz en la Casa de Jehová, como en día de fiesta solemne.
No habéis de andar pues en las costumbres de las naciones que voy a echar de delante de vosotros; porque todas estas maldades han hecho ellos, por lo cual yo los tengo en abominación.
y si rechazareis con desprecio mis estatutos, y vuestra alma detestare mis leyes, de modo que no cumpliereis todos mis mandamientos, mas rompiereis mi pacto;
Porque la tierra habrá quedado desocupada de ellos, y habrá gozado sus días de descanso, mientras estaba en desolación sin ellos; y ellos habrán aceptado el castigo de su iniquidad, el cual yo les impuse por cuanto, sí, por cuanto rechazaron con desprecio mis leyes, y su alma detestó mis estatutos.
Mas ni aun por todo esto, estando ellos en la tierra de sus enemigos, los habré desechado, ni los habré detestado, de manera. que los destruyera, anulando mi pacto con ellos; por cuanto soy Jehová su Dios;
En hora buena pues, si es inmunda la tierra de vuestra posesión, pasaos a la tierra de la posesión de Jehová, donde está de asiento el Tabernáculo de Jehová, y tomad posesión en medio de nosotros; mas no os rebeléis contra Jehová, ni os rebeléis contra nosotros, edificándoos otro altar, además del altar de Jehová nuestro Dios.
y Finees hijo del sumo sacerdote Eleazar dijo a los hijos de Rubén y a los hijos de Gad y a los hijos de Manasés: Hoy sabemos que Jehová está en medio de nosotros, puesto que no habéis cometido tal traición contra Jehová. Ahora pues habéis librado a los hijos de Israel de mano de Jehová.
Y oí una gran voz procedente del cielo, que decía: ¡He aquí el tabernáculo de Dios está con los hombres, y él habitará con ellos, y ellos serán pueblos suyos, y el mismo Dios con ellos estará, como Dios suyo!
Por esto están delante del trono de Dios, y le sirven día y noche en su templo: y el que está sentado sobre el trono extenderá su tabernáculo sobre ellos.