¶Entonces Jehová dijo a Josué: Extiende hacia Hai la lanza que tienes en la mano; porque yo la daré en tu mano. Josué pues extendió hacia la ciudad la lanza que tenía en su mano.
Josué 8:19 - Biblia Version Moderna (1929) Con lo cual los de la emboscada se levantaron prestamente de su lugar, y corrieron luego que él extendió la mano; y entraron en la ciudad y la tomaron; y diéronse prisa a poner fuego a la ciudad. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y levantándose prontamente de su lugar los que estaban en la emboscada, corrieron luego que él alzó su mano, y vinieron a la ciudad, y la tomaron, y se apresuraron a prenderle fuego. Biblia Nueva Traducción Viviente En cuanto Josué dio la señal, todos los hombres que esperaban en la emboscada salieron de golpe de sus puestos e invadieron la ciudad en masa. Enseguida la sitiaron y le prendieron fuego. Biblia Católica (Latinoamericana) y apenas hubo hecho el gesto, los que estaban emboscados salieron del lugar donde se encontraban. Corrieron, entraron en la ciudad y se la tomaron, luego prendieron fuego a la ciudad. La Biblia Textual 3a Edicion Y tan pronto él hubo extendido su mano, los emboscados salieron rápidamente de su escondite y corriendo, entraron en la ciudad y la capturaron, y se apresuraron a prender fuego a la ciudad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 y, al extender la mano, los emboscados surgieron rápidamente de sus posiciones, llegaron corriendo a la ciudad, se apoderaron de ella y se apresuraron a incendiarla. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y levantándose prestamente de su lugar los que estaban en la emboscada, corrieron luego que él alzó su mano, y vinieron a la ciudad, y la tomaron, y se apresuraron a prenderle fuego. |
¶Entonces Jehová dijo a Josué: Extiende hacia Hai la lanza que tienes en la mano; porque yo la daré en tu mano. Josué pues extendió hacia la ciudad la lanza que tenía en su mano.
Y harás con Hai y con su rey, según hiciste a Jericó y a su rey; solamente que sus despojos y sus bestias los apresaréis para vosotros. Pon una emboscada contra la ciudad, detrás de ella.
Y los hombres de Hai volvieron el rostro hacia atrás, y al mirar, he aquí que el humo de la ciudad iba subiendo al cielo; y ellos no tuvieron parte alguna a donde huir, ni por un lado ni por otro; pues la gente de Israel que había huído hacia el desierto volvía ya sobre sus perseguidores.
Entonces todos los hombres de Israel se levantaron de su puesto, y se pusieron en orden en Baal-tamar. También los Israelitas de la emboscada se lanzaron desde su lugar, es a saber, desde la cueva de Gabaa.
Entonces la emboscada dióse prisa para arrojarse sobre Gabaa; avanzóse pues la emboscada e hirió toda la ciudad a filo de espada.