Sea Jehová nuestro Dios con nosotros así como fué con nuestros padres, (no nos deje, ni nos deseche),
Josué 24:23 - Biblia Version Moderna (1929) Ahora por tanto, dijo Josué, desechad los dioses extraños que están en medio de vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová, el Dios de Israel. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová Dios de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente —Muy bien —dijo Josué—, entonces destruyan los ídolos que tienen entre ustedes y entréguenle el corazón al Señor, Dios de Israel. Biblia Católica (Latinoamericana) Pues bien, dijo José, boten ahora los dioses extranjeros que tienen entre ustedes y vuelvan su corazón hacia Yavé, el Dios de Israel. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Apartad pues los dioses extraños que hay entre vosotros, e inclinad vuestro corazón hacia YHVH Dios de Israel! Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Pues bien, apartad los dioses extraños que hay en medio de vosotros, e inclinad vuestro corazón hacia Yahveh, Dios de Israel'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Quitad, pues, ahora los dioses ajenos que están entre vosotros, e inclinad vuestro corazón a Jehová, el Dios de Israel. |
Sea Jehová nuestro Dios con nosotros así como fué con nuestros padres, (no nos deje, ni nos deseche),
para que incline nuestro corazón hacia sí, a fin de que andemos en todos sus caminos, y para que guardemos sus mandamientos, y sus estatutos, y sus leyes, que prescribió a nuestros padres.
¡No dejes inclinar mi corazón a cosa mala, a hacer maldades con los obradores de iniquidad; ni coma yo de sus delicias!
Yo soy Jehová, Dios tuyo; el que te hice subir de la tierra de Egipto: ¡ensancha tu boca, y yo la llenaré!
No hagáis a ningún otro conmigo: dioses de plata o dioses de oro no los haréis para vosotros.
de modo que hagas atento a la sabiduría tu oído, e inclines tu corazón hacia la inteligencia!
Efraim dirá: ¿Qué tengo yo ya que ver con los ídolos? Yo le he respondido, y le observaré; le seré como abeto verde procedente de mí es hallado tu fruto.
Ahora pues temed a Jehová, y servidle a él con sinceridad y en verdad; y desechad a los dioses que sirvieron vuestros padres al otro lado del río, y en Egipto, y servid a Jehová.