Y a los ocho días será circuncidado de entre vosotros cada varón en vuestras generaciones, el nacido en tu casa, y el comprado con dinero de cualquier hijo de tierra extraña, que no fuere de tu simiente.
Jonás 4:10 - Biblia Version Moderna (1929) Y respondió Jehová: Tú tienes lástima de la calabacera, por la cual no trabajaste, ni la hiciste tú crecer; la cual creció en una noche, y en una noche pereció: Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Jehová: Tuviste tú lástima de la calabacera, en la cual no trabajaste, ni tú la hiciste crecer; que en espacio de una noche nació, y en espacio de otra noche pereció. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el Señor le respondió: —Sientes lástima por una planta, aunque tú no hiciste nada para que creciera. Creció rápido y murió rápido. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé le replicó: 'Te afliges por un ricino que no te ha costado trabajo alguno y que no has hecho crecer, que en una noche ha nacido y en una noche ha muerto. La Biblia Textual 3a Edicion Le dijo YHVH: Te apiadaste de la calabacera, por la cual no trabajaste ni la hiciste crecer, que en una noche nació y en una noche pereció. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh le respondió: 'Así que tú te lamentas por el ricino, por el que ni te has fatigado ni le has hecho crecer; que nació en una noche y en la otra se secó. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Jehová: Tuviste tú lástima de la calabacera, en la cual no trabajaste, ni tú la hiciste crecer; que en espacio de una noche nació, y en espacio de otra noche pereció: |
Y a los ocho días será circuncidado de entre vosotros cada varón en vuestras generaciones, el nacido en tu casa, y el comprado con dinero de cualquier hijo de tierra extraña, que no fuere de tu simiente.
¿Y acaso yo no he de tener lástima de Nínive, esta gran ciudad, en la cual hay más de ciento veinte mil seres humanos que no saben discernir su mano derecha de la izquierda, y también mucho ganado?
¶Y dijo Dios a Jonás: ¿Haces bien en enojarte a causa de la calabacera? A lo cual respondió: ¡Sí, hago bien en enojarme, hasta querer morir!
Porque todos los días que viviere el hijo de Isaí sobre la tierra, no serás estable tú, ni tu reino. Ahora pues, envía, y tráemele; porque es digno de muerte.