Mas Jehová había dicho a Ahías: He aquí que la mujer de Jeroboam viene para inquirir cierta cosa de ti en cuanto a su hijo; porque está enfermo: así y así le hablarás; porque será que cuando venga, fingirá que es otra persona.
Jeremías 32:7 - Biblia Version Moderna (1929) He aquí que Hanamel, hijo de tu tío Salum, vendrá a ti, diciendo: Cómprate mi campo que está en Anatot; porque a ti corresponde el derecho de redención, para que lo compres. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 He aquí que Hanameel hijo de Salum tu tío viene a ti, diciendo: Cómprame mi heredad que está en Anatot; porque tú tienes derecho a ella para comprarla. Biblia Nueva Traducción Viviente «Tu primo Hanameel, hijo de Salum, vendrá y te dirá: “Compra mi terreno en Anatot. Por ley tienes derecho a comprarlo antes de que lo ofrezca a algún otro”». Biblia Católica (Latinoamericana) Hanamel, hijo de tu tío Selum, va a venir a verte para decirte: Cómprate mi campo, que tengo en Anatot, porque a ti te toca comprarlo por derecho de rescate. La Biblia Textual 3a Edicion Mira, Hanameel, hijo de tu tío Salum, viene para decirte: Cómprame mi heredad que está en Anatot, porque tú tienes el derecho de redención para comprarla. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Mira que Janamel, hijo de tu tío Salún, viene a ti para decirte: 'Cómprate mi campo de Anatot, pues tienes el derecho de rescate para comprarlo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) He aquí que Hanameel, hijo de Salum tu tío, viene a ti, diciendo: Cómprame mi heredad que está en Anatot; porque tú tienes derecho a ella para comprarla. |
Mas Jehová había dicho a Ahías: He aquí que la mujer de Jeroboam viene para inquirir cierta cosa de ti en cuanto a su hijo; porque está enfermo: así y así le hablarás; porque será que cuando venga, fingirá que es otra persona.
PALABRAS de Jeremías hijo de Helcías, uno de los sacerdotes que habitaban en Anatot, en la tierra le Benjamín:
Por tanto, así dice Jehová respecto de los hombres de Anatot, los cuales procuran quitarte la vida, diciendo: No profetices en el nombre de Jehová, no sea que mueras a nuestras manos.
En efecto, vino a mí Hanamel, hijo de mi tío, conforme al oráculo de Jehová, al patio de la cárcel, y me dijo: Ruégote compres mi campo que está en Anatot, que está en la tierra de Benjamín; porque tuyo es el derecho de posesión, y tuyo el derecho de redención: cómpratelo. Entonces conocí que era aquello oráculo de Jehová.
¶La tierra pues no podrá venderse en perpetuidad; porque mía es la tierra; pues que vosotros sois extranjeros y transeuntes para conmigo.
Y en toda la tierra de vuestra posesión concederéis redención a la tierra.
Cuando se empobreciere tu hermano, y vendiere algo de su posesión, vendrá su redentor, el pariente suyo más cercano, y redimirá lo que hubiere vendido su hermano.
También los campos de los ejidos de las ciudades de ellos, no podrán venderse, porque son posesión perpetua para ellos.
o si no, su tío, o el hijo de su tío debe redimirle; o algún pariente cercano suyo, de su linaje, debe redimirle; o si su propia mano hubiere adquirido medios, redímase a sí mismo.
Manda a los hijos de Israel que de la herencia de su propia porción den a los Levitas ciudades en qué habitar; también los ejidos de aquellas ciudades, al rededor de ellas, daréis a los Levitas.