Jeremías 15:8 - Biblia Version Moderna (1929) Sus viudas se me aumentan más que la arena de los mares; les traigo el asolador al mediodía, contra la madre del escogido guerrero: hago caer sobre ella de repente angustia y terrores. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Sus viudas se me multiplicaron más que la arena del mar; traje contra ellos destruidor a mediodía sobre la madre y sobre los hijos; hice que de repente cayesen terrores sobre la ciudad. Biblia Nueva Traducción Viviente Habrá más viudas que granos de arena a la orilla del mar. Traeré al destructor al mediodía contra las madres de los jóvenes. Súbitamente haré que caigan sobre ellas la angustia y el terror. Biblia Católica (Latinoamericana) Sus viudas son más numerosas que las arenas del mar. He dejado caer al salteador, en pleno día, sobre las madres de los jóvenes guerreros; de repente, se han apoderado de ellas el miedo y el terror. La Biblia Textual 3a Edicion Sus viudas me serán más que la arena del mar; Traeré contra madres e hijos al devastador, Que devastará en pleno día, Y súbitamente haré caer sobre ellos la angustia y el espanto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sus viudas, por causa mía, son más numerosas que la arena del mar. He traído contra esta madre de jóvenes guerreros un devastador al mediodía; eché sobre ella de repente terror y espanto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Sus viudas se multiplicaron más que la arena de los mares; traje contra ellos destructor a mediodía sobre la madre y los hijos; le hice caer de repente sobre ellos, y terrores sobre la ciudad. |
Y las puertas de Sión se lamentarán, y se vestirán de luto; ¡y ella, desolada, se sentará en tierra!
Y SIETE mujeres echarán mano de un solo hombre, en aquel día, diciendo: ¡Nuestro propio pan comeremos, y de ropa nuestra nos vestiremos; tan solo seamos llamadas de tu nombre! ¡quita tú nuestro oprobio!
Porque así dice Jehová acerca de los hijos e hijas que nacieren en este lugar, y acerca de sus madres que los dieren a luz, y acerca de sus padres que los engendraren en esta tierra:
¡Por tanto abandona sus hijos al hambre, y a ellos mismos entrégalos al poder de la espada; y sus mujeres también queden sin hijos, y viudas; y mueran sus maridos de peste, y caigan a cuchillo sus mancebos en batalla!
Destino contra ti asoladores, cada uno con sus armas; los cuales cortarán tus cedros escogidos, y los echarán al fuego.
¡Haced mención de ello a las naciones; ved, anunciad a Jerusalem, que vienen sitiadores de una tierra lejana, y hacen resonar su voz contra las ciudades de Judá!
Por tanto el león del bosque los mata; el lobo del desierto los saquea; el leopardo vigila en torno de sus ciudades; cualquiera que de ellas saliere, será despedazado: porque sus transgresiones son muchas, y son agravadas sus reincidencias.
¡Oh hija de mi pueblo, cíñete de saco, y revuélcate en la ceniza! haz por ti misma llanto, como por un hijo único, amarguísima lamentación! porque viene súbitamente el saqueador sobre nosotros.
Hemos venido a ser huérfanos; somos sin padre, y nuestras madres son como viudas.
Conjuración de sus profetas hay en medio de ella: como león rugiente que arrebata la presa, ellos devoran almas; se apoderan de tesoros y cosas preciosas; multiplican las viudas en medio de ella.
Y tú, oh Israel, tropezarás de día, y el profeta juntamente contigo tropezará de noche; y yo destruiré a tu madre.
como un lazo; pues así vendrá sobre todos los que habitan sobre la haz de toda la tierra.