treinta camellas paridas con sus crías: cuarenta vacas y diez toros; veinte asnas y diez pollinos.
Génesis 32:16 - Biblia Version Moderna (1929) Y los entregó en manos de sus siervos, cada manada aparte, y dijo a sus siervos: Pasad delante de mí, y dejaréis un buen espacio entre manada y manada. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y lo entregó a sus siervos, cada manada de por sí; y dijo a sus siervos: Pasad delante de mí, y poned espacio entre manada y manada. Biblia Nueva Traducción Viviente Separó esos animales en manadas y asignó cada manada a un siervo distinto. Luego dijo a estos siervos: «Vayan delante de mí con los animales, pero guarden una buena distancia entre las manadas». Biblia Católica (Latinoamericana) treinta camellas paridas con sus crías, cuarenta vacas y diez toros, veinte mulas y diez burros. La Biblia Textual 3a Edicion Y los entregó en mano de sus siervos, cada manada por separado. Y dijo a sus siervos: Pasad delante de mí y dejad espacio entre manada y manada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 treinta camellas de leche con sus crías, cuarenta vacas y diez toros, veinte asnas y diez asnos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y lo entregó en mano de sus siervos, cada manada de por sí; y dijo a sus siervos: Pasad delante de mí, y poned espacio entre manada y manada. |
treinta camellas paridas con sus crías: cuarenta vacas y diez toros; veinte asnas y diez pollinos.
Y mandó al primero, diciendo: Cuando te encontrare Esaú mi hermano, y te preguntare, diciendo: ¿De quién eres? ¿y a dónde vas? ¿y de quién son estos que van delante de ti?
Y diréis también: He aquí, tu siervo Jacob viene en pos de nosotros. Porque decía: Aplacaré su ira con el presente que va delante de mí; después de esto veré su rostro; quizás me mirará benignamente.
Bien le va al hombre que tiene misericordia y presta: manejará sus asuntos con juicio.
¶He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, cautelosos como serpientes, y sencillos como palomas.
dijo a sus mozos: Pasad delante de mí, y he aquí que yo voy tras vosotros: mas a su marido Nabal no le dijo nada.