¶Entonces dijo Salomón: Jehová ha dicho que moraría en las tinieblas espesas.
Éxodo 19:9 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Entonces Jehová dijo a Moisés: He aquí que yo vendré a ti en una nube espesa, a fin de que oiga el pueblo mientras yo hablo contigo, y que también te crea para siempre. Y refirió Moisés a Jehová las palabras del pueblo. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Entonces Jehová dijo a Moisés: He aquí, yo vengo a ti en una nube espesa, para que el pueblo oiga mientras yo hablo contigo, y también para que te crean para siempre. Y Moisés refirió las palabras del pueblo a Jehová. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego el Señor le dijo a Moisés: «Yo me presentaré ante ti en una densa nube, para que el pueblo pueda oírme cuando hable contigo; así ellos siempre confiarán en ti». Moisés le dijo al Señor lo que el pueblo había dicho. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé dijo a Moisés: 'Yo vendré a ti en medio de una espesa nube para que el pueblo oiga cuando yo hable contigo y tenga fe en ti también para siempre. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH dijo a Moisés: He aquí Yo vengo a ti en el espesor de la nube, para que el pueblo oiga cuando Yo hable contigo, y también crean en ti siempre. Y Moisés declaró a YHVH las palabras del pueblo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh dijo a Moisés: 'Mira, yo vendré a ti en una densa nube, para que el pueblo oiga cuando yo hable contigo, y tenga siempre fe en ti'. Y Moisés refirió a Yahveh las palabras del pueblo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová dijo a Moisés: He aquí, yo vengo a ti en una nube espesa, para que el pueblo oiga mientras yo hablo contigo, y también para que te crean para siempre. Y Moisés refirió las palabras del pueblo a Jehová. |
¶Entonces dijo Salomón: Jehová ha dicho que moraría en las tinieblas espesas.
Y por la mañana madrugaron y salieron al desierto de Tecoa. Y en tanto que iban saliendo al combate, Josafat se levantó, y dijo: ¡Oídme, oh Judá y vosotros los habitantes de Jerusalem! ¡Creed en Jehová vuestro Dios, así estaréis firmes; creed en sus profetas, así prosperaréis!
ENTONCES dijo Salomón: Jehová ha dicho que moraría entre las tinieblas espesas.
Nubes y tinieblas están al rededor de él; justicia y juicio son el asiento de su trono.
En la columna de nube hablaba con ellos: guardaban sus testimonios, y el estatuto que les dió.
Israel pues vió la obra prodigiosa que hizo Jehová contra los Egipcios; y temió el pueblo a Jehová; y creyeron en Jehová y en Moisés su siervo.
¶Y aconteció que el día tercero, al despuntar la mañana, hubo truenos y relámpagos y nube densísima sobre el monte, y un sonido de trompeta sobremanera fuerte. Y temblaba todo el pueblo que estaba en el campamento.
Mas el pueblo se mantuvo a lo lejos; y Moisés se llegó a las densas tinieblas en donde estaba Dios.
Y Jehová descendió en la nube y se estuvo con él allí, y proclamó el NOMBRE de Jehová.
Y creyó el pueblo; y oyendo que Jehová había visitado a los hijos de Israel, y que había mirado su aflicción, inclinaron la cabeza y adoraron.
para que así crean ellos que te ha aparecido Jehová, el Dios de sus padres, el Dios de Abraham, el Dios de Isaac y el Dios de Jacob.
CARGA de Egipto: He aquí que Jehová cabalgará sobre una nube ligera, y entrará en Egipto: y se conturbarán los ídolos de Egipto a su presencia; y se derretirá el corazón de Egipto dentro de él.
También la cabeza de Efraim es y será Samaria, y la cabeza de Samaria, el hijo de Remalías. Si no creyereis, no tendréis estabilidad.
Entonces descendió Jehová en la columna de nube, y púsose a la entrada del Tabernáculo de Reunión; y llamó a Aarón y a María, y ellos dos se presentaron.
Todavía hablaba él, cuando, he aquí, una nube de luz que les cubrió; y he aquí una voz salía de la nube que decía: ¡Éste es mi amado Hijo, en quien tengo mi complacencia! ¡oídle a él!
Vino entonces una nube que les hacía sombra; y salió una voz de la nube que decía: Éste es mi amado Hijo; oídle a él.
El que oye a vosotros, a mí me oye; y el que a vosotros os desecha, a mí me desecha; y el que me desecha a mí desecha al que me envió.
especialmente aquello del día en que te presentaste delante de Jehová tu Dios en Horeb, habiéndome dicho Jehová: Júntame al pueblo para que yo le haga oír mis palabras, las que aprenderán, para que me teman todos los días que vivieren sobre la tierra, y las enseñen a sus hijos.
Desde los cielos te hizo oír su voz, para corregirte; y sobre la tierra te hizo ver su gran fuego, y sus palabras has oído de en medio del fuego.
He aquí que viene con las nubes, y todo ojo le verá; y también aquellos que le traspasaron; y todas las tribus de la tierra plañirán a causa de él. Así sea. Amén.