Διαδικτυακή Βίβλος

Διαφημίσεις


Ολόκληρη η Βίβλος Παλαιά Διαθήκη Καινή Διαθήκη




Esdras 7:8 - Biblia Version Moderna (1929)

Y llegó a Jerusalem en el mes quinto, que era del año séptimo del rey.

Δείτε το κεφάλαιο
προβολή Interlinear Bible

Περισσότερες εκδόσεις

Biblia Reina Valera 1960

Y llegó a Jerusalén en el mes quinto del año séptimo del rey.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Nueva Traducción Viviente

Esdras llegó a Jerusalén en agosto de ese año.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Católica (Latinoamericana)

Esdras llegó a Jerusalén el quinto mes del séptimo año del rey.

Δείτε το κεφάλαιο

La Biblia Textual 3a Edicion

y en el mes quinto del año séptimo del rey,° llegó a Jerusalem.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Esdras llegó a Jerusalén en el mes quinto del año séptimo del rey.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y llegó a Jerusalén en el mes quinto, el año séptimo del rey.

Δείτε το κεφάλαιο
Άλλες μεταφράσεις



Esdras 7:8
7 Σταυροειδείς Αναφορές  

¶En efecto, todos los hombres de Judá y de Benjamín se congregaron en Jerusalem dentro de los tres días; era el mes nono, el veinte del mes; y sentóse todo el pueblo en la plaza de la Casa de Dios, temblando con motivo de este asunto, y a causa de las lluvias.


Y con él subieron a Jerusalem algunos de los hijos de Israel, y de los sacerdotes y de los levitas, y de los cantores, y de los porteros, y de los netineos, en el año séptimo del rey Artajerjes.


Porque el primer día del mes primero dió principio a la subida de Babilonia, y en el primero del mes quinto llegó a Jerusalem, según era buena la mano de Dios sobre él.


Llegamos pues a Jerusalem, y descansamos allí tres días.


porque siervos somos. Sin embargo, en nuestra servidumbre no nos ha desamparado nuestro Dios, sino que nos ha extendido su misericordia delante de los reyes de Persia, para volver a darnos vida, para hacer levantar la Casa de nuestro Dios, y restaurar sus ruinas, y para darnos un vallado en Judá y Jerusalem.


De esta suerte Ester fué conducida al rey Asuero, a la casa real, en el mes décimo, que es el mes de Tebet, en el año séptimo de su reinado.


Sabe pues, y entiende que desde que salga la orden para restaurar y reedificar a Jerusalem, hasta el Mesías, el Príncipe, habrá siete semanas y sesenta y dos semanas: la ciudad volverá a edificarse con calle y foso, bien que en tiempos de angustia.