No, señor mío; óyeme: el campo te lo doy, y la cueva que está en él te la doy; en presencia de los hijos de mi pueblo te la doy: entierra tu muerto.
2 Samuel 24:24 - Biblia Version Moderna (1929) Pero el rey respondió a Arauna: No, sino que ciertamente por precio te lo he de comprar; pues que no ofreceré a Jehová mi Dios holocaustos sin costo. Por manera que David compró la era y los bueyes en cincuenta siclos de plata. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y el rey dijo a Arauna: No, sino por precio te lo compraré; porque no ofreceré a Jehová mi Dios holocaustos que no me cuesten nada. Entonces David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero el rey le respondió a Arauna: —No, insisto en comprarlo; no le presentaré ofrendas quemadas al Señor mi Dios que no me hayan costado nada. De modo que David le pagó cincuenta piezas de plata por el campo de trillar y por los bueyes. Biblia Católica (Latinoamericana) No, quiero pagarte su justo precio, no quiero ofrecer a Yavé mi Dios holocaustos que nada me cuestan. David compró entonces la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. La Biblia Textual 3a Edicion Pero el rey dijo a Arauna: No, sino que ciertamente por precio te lo compraré, pues no elevaré holocaustos a YHVH mi Dios que no me cuesten nada. Así David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Respondió el rey a Arauná: 'No; te lo compraré por su precio, pues no quiero yo ofrecer a Yahveh, mi Dios, holocaustos que no me cuesten nada'. Y David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el rey dijo a Arauna: No, sino por precio te lo compraré; porque no ofreceré a Jehová mi Dios holocaustos que no me cuesten nada. Entonces David compró la era y los bueyes por cincuenta siclos de plata. |
No, señor mío; óyeme: el campo te lo doy, y la cueva que está en él te la doy; en presencia de los hijos de mi pueblo te la doy: entierra tu muerto.
y habló con Efrón en presencia de todo el pueblo del país, diciendo: ¡Ojalá que tan sólo me escucharas! te doy el valor del campo; admítelo de mí, y enterraré allí mi muerto.
De manera que convino Abraham con Efrón, y Abraham le pesó a Efrón el dinero que había dicho, en presencia de los hijos de Het, cuatrocientos siclos de plata, moneda corriente entre mercaderes.
ENTONCES se levantó Satanás contra Israel, e incitó a David a que numerase a Israel.
ENTONCES dijo David: ¡Aquí mismo ha de colocarse la Casa de Jehová Dios, y aquí el altar de holocaustos para Israel!
No devolváis a nadie mal por mal. Poned cuidado en hacer lo que sea honroso delante de todos los hombres.: