¡Saúl y Jonatán, oh cuán amables y cuán hermosos eran en su vida, y en su muerte no fueron divididos! ¡Más ligeros eran que águilas, más fuertes que leones!
2 Samuel 1:19 - Biblia Version Moderna (1929) ¡Ay de la gloria de Israel, traspasada, oh Gilboa, sobre tus alturas! ¡Cómo han caído los poderosos! Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 ¡Ha perecido la gloria de Israel sobre tus alturas! ¡Cómo han caído los valientes! Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Oh Israel, tu orgullo y tu alegría yacen muertos en las colinas! ¡Oh, cómo han caído los héroes poderosos! Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Ay, la gloria de Israel pereció en los montes!
¿Cómo cayeron esos héroes? La Biblia Textual 3a Edicion ¡Ay del esplendor de Israel, herido en tus alturas! ¡Cómo han caído los valientes! Biblia Serafín de Ausejo 1975 '¡Ha perecido en tus montes tu gloria, oh Israel! ¡Cómo han caído los héroes! Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¡Ha perecido la gloria de Israel sobre tus alturas! ¡Cómo han caído los valientes! |
¡Saúl y Jonatán, oh cuán amables y cuán hermosos eran en su vida, y en su muerte no fueron divididos! ¡Más ligeros eran que águilas, más fuertes que leones!
¡Cómo han caído los poderosos en medio de la batalla! ¡Ay de Jonatán, traspasado, oh Gilboa, sobre tus alturas!
En aquel día el Vástago de Jehová será espléndido y glorioso, y el fruto de la tierra excelente y hermoso, para los escapados de Israel.
Pues creció delante de él como una planta tierna, y como renuevo de una raíz de tierra seca: no tiene forma ni hermosura, para que le miremos; ni tiene buen parecer, para que le deseemos.
ALEPH.- ¡Cómo ha cubierto el Señor a la hija de Sión con una nube en su ira! ¡ha arrojado del cielo a la tierra la hermosura de Israel, y no se acuerda del estrado de sus pies en el día de su ira!
La corona ha caído de nuestra cabeza; ¡ay de nosotros, por cuanto hemos pecado!
Y tomé mi cayado Gracia, y lo corté en dos, para anular así mi pacto que había celebrado con todas las tribus.
¶En efecto, pastoreé el rebaño destinado al matadero, verdaderamente un rebaño desdichado; y tomé para mí dos cayados; al uno le llamé Gracia, y al otro Ataduras; y así pastoreé el rebaño.
¶Y aconteció al otro día que vinieron los Filisteos para despojar los muertos; y hallaron a Saúl y a sus tres hijos tendidos en el monte de Gilboa.