y allí el sacerdote Sadoc y el profeta Natán le ungirán por rey sobre Israel; y tocaréis trompeta, y diréis: ¡Viva el rey Salomón!
2 Reyes 9:3 - Biblia Version Moderna (1929) en seguida tomarás la redoma de aceite, y la derramarás sobre su cabeza, diciendo: Así dice Jehová: Yo te he ungido por rey de Israel. Luego abrirás la puerta y huirás; no esperes más. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Toma luego la redoma de aceite, y derrámala sobre su cabeza y di: Así dijo Jehová: Yo te he ungido por rey sobre Israel. Y abriendo la puerta, echa a huir, y no esperes. Biblia Nueva Traducción Viviente y derrama el aceite sobre su cabeza. Dile: “Esto dice el Señor: ‘Yo te unjo para que seas rey de Israel’”. Luego abre la puerta ¡y corre por tu vida!». Biblia Católica (Latinoamericana) y luego toma la alcuza de aceite y derrámala sobre su cabeza, diciéndole: Esto dice Yavé: ¡Te he consagrado como rey de Israel! Después abre la puerta y sal huyendo sin tardanza'. La Biblia Textual 3a Edicion Toma después la vasija de aceite, derrámalo sobre su cabeza y di: Así dice YHVH: ¡Yo te he ungido por rey sobre Israel! Luego abre la puerta y huye; no esperes. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Toma la alcuza de aceite y derrámala sobre su cabeza, diciéndole: 'Así habla Yahveh: yo te unjo por rey de Israel'. Abre luego la puerta y escapa sin detenerte'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Toma luego el frasco de aceite y derrámalo sobre su cabeza, y di: Así dice Jehová: Yo te he ungido por rey sobre Israel. Y abriendo la puerta, huye, y no esperes. |
y allí el sacerdote Sadoc y el profeta Natán le ungirán por rey sobre Israel; y tocaréis trompeta, y diréis: ¡Viva el rey Salomón!
también a Jehú hijo de Namsi le ungirás por rey de Israel; y ungirás a Eliseo hijo de Safat, de Abel-mehola, por profeta en tu lugar.
A lo cual respondió Hazael: Pues ¿quién es tu siervo, perro como soy, para que él haga esta cosa tan grande? Entonces le dijo Eliseo: Jehová me ha hecho verte a ti rey de Siria.
Jehú pues se puso en pie, y entró dentro de la casa; y el otro derramó el aceite sobre su cabeza, y le dijo: Así dice Jehová, el Dios de Israel: Yo te he ungido por rey sobre el pueblo de Jehová, sobre Israel.
Y por disposición de Dios era la destrucción de Ocozías, por haber él ido a ver a Joram; pues cuando hubo venido, salió con Joram contra Jehú hijo de Namsi, a quien Jehová había ungido para exterminar la casa de Acab.
Entonces tomarás el aceite de la unción y se lo derramarás sobre la cabeza, ungiéndole así.
Y EN el año segundo del reinado de Nabucodonosor, tuvo Nabucodonosor sueños; y su espíritu fué perturbado, de modo que no pudo dormir.
Y todos los moradores de la tierra por una nada le son contados; pues hace conforme a su voluntad en el ejército del cielo, y entre los habitantes de la tierra, y no hay quien pueda detener su mano, ni decirle: ¿Qué haces tú?
¡Oye tú, oh rey¡ El Altísimo Dios dió a Nabucodonosor, tu padre, el reino, y la grandeza, y la gloria, y la majestad;
Entonces derramó del aceite de la unción sobre la cabeza de Aarón, ungiéndole así, para santificarle.
¶He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, cautelosos como serpientes, y sencillos como palomas.
¶Y cuando ellos hubieron partido, he aquí que un ángel del Señor aparece en sueños a José, diciendo: Levántate, y toma al niño y a su madre, y huye a Egipto; y estáte allí hasta que yo te lo diga; porque Herodes buscará al niño para destruirle.
se llegó a él una mujer que traía un frasco de alabastro de ungüento muy precioso, y derramólo sobre su cabeza, estando él recostado a la mesa.
TOMÓ entonces Samuel una redoma de aceite, y derramólo sobre la cabeza de Saúl, y besándole, dijo: ¿No es por cuanto Jehová te ha ungido por príncipe sobre su herencia?
Y DIJO Samuel a Saúl: A mí me envió Jehová para ungirte rey sobre su pueblo, sobre Israel. Ahora pues, escucha la voz de las palabras de Jehová.
Samuel pues le dijo: ¿No eras pequeño en tus propios ojos cuando fuiste constituído cabeza de las tribus de Israel, y te ungió Jehová por rey sobre Israel?
Y respondió Samuel: ¿Cómo podré ir? pues lo oirá Saúl, y me matará. Y dijo Jehová: Tomarás contigo una novilla de la vacada, y dirás: Para ofrecer sacrificio a Jehová he venido.
Como a estas horas el día de mañana te enviaré un hombre del país de Benjamín, a quien ungirás por príncipe sobre mi pueblo Israel, y él salvará a mi pueblo de mano de los Filisteos; porque he mirado propicio a mi pueblo, por cuanto ha llegado a mí su clamor.