2 Reyes 3:4 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Y Mesa, rey de Moab, era ganadero, y pagaba de tributo al rey de Israel cien mil corderos, y cien mil carneros, con la lana; Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Entonces Mesa rey de Moab era propietario de ganados, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos y cien mil carneros con sus vellones. Biblia Nueva Traducción Viviente Mesa, rey de Moab, se dedicaba a la cría de ovejas. Acostumbraba pagar al rey de Israel un tributo anual de cien mil corderos y la lana de cien mil carneros; Biblia Católica (Latinoamericana) Mesa, rey de Moab, tenía rebaños. Le pagaba al rey de Israel un tributo de cien mil corderos y cien mil carneros, y además la lana. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Mesa, rey de Moab, era criador de ovejas y tributaba al rey de Israel la lana de cien mil corderos, y cien mil carneros lanudos.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Mesá, rey de Moab, se dedicaba a la cría de ganado y pagaba al rey de Israel un tributo de cien mil corderos y cien mil carneros con su lana. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Mesa rey de Moab era propietario de ganados, y pagaba al rey de Israel cien mil corderos, cien mil carneros, más la lana. |
Hirió también a los Moabitas; y los midió con cordel, haciéndolos acostarse por tierra; y midió dos cordeles para hacerlos morir, y un cordel entero para darles vida. Así los Moabitas vinieron a ser siervos de David, y trajeron presentes.
Y puso David guarniciones en Siria de Damasco; y los Siros vinieron a ser siervos de David, y trajeron presentes. Y Jehová hizo triunfar a David dondequiera que iba.
Hirió también a Moab; y los Moabitas vinieron a ser siervos de David, y le trajeron presentes.
Edificó también torres en el desierto, y abrió a pico muchas cisternas; porque tenía grandes posesiones de ganado, así en la Sefela como en la mesa de Judá; tenía también labradores y viñadores en las montañas, y en el Carmelo de Judá; porque era aficionado a la agricultura.
Y su hacienda era siete mil ovejas y tres mil camellos, y quinientas yuntas de bueyes, y quinientas asnas, y muy numerosa servidumbre; de manera que aquel hombre era más grande que todos los hijos de Oriente.
¶Y Jehová bendijo el postrer estado de Job más que el primero; de modo que tuvo catorce mil ovejas, y seis mil camellos, y mil yuntas de bueyes, y mil asnas.
Moab, la vasija en que me lavo los pies; a Edom echaré mi zapato! ¡Filistía, grita con triunfo, si puedes, sobre mí!