No temeré de diez millares de gente, que se pusieren en derredor contra mí.
1 Samuel 17:32 - Biblia Version Moderna (1929) Entonces dijo David a Saúl: No se desmaye el corazón de nadie a causa de él; tu siervo irá y peleará con aquel filisteo. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y dijo David a Saúl: No desmaye el corazón de ninguno a causa de él; tu siervo irá y peleará contra este filisteo. Biblia Nueva Traducción Viviente —No se preocupe por este filisteo —le dijo David a Saúl—. ¡Yo iré a pelear contra él! Biblia Católica (Latinoamericana) David dijo a Saúl: '¡No hay por qué tenerle miedo a ése! Yo, tu servidor, iré a pelear con ese filisteo'. La Biblia Textual 3a Edicion Y David dijo a Saúl: No desfallezca el corazón de ningún hombre por causa de él. Tu siervo irá y peleará contra ese filisteo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo David a Saúl: 'Que no desmaye el corazón de nadie por ése; tu siervo saldrá a combatir contra ese filisteo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo David a Saúl: No desmaye ninguno a causa de él; tu siervo irá y peleará con este filisteo. |
No temeré de diez millares de gente, que se pusieren en derredor contra mí.
decid a los que son de corazón tímido: ¡Sed fuertes! ¡no temáis! ¡he aquí a vuestro Dios! ¡La venganza viene, la retribución de Dios! ¡él mismo viene, y os salvará!
Y le dirás: ¡Ten cuidado, y estáte quieto! ¡no temas, y no se desfallezca tu corazón, a causa de estos dos cabos de tizones humeantes; a causa de la ira furiosa de Rezín y Siria, y del hijo de Remalías!
¶Y Caleb acalló al pueblo que murmuraba contra Moisés; y les dijo: ¡Subamos de una vez, y tomemos posesión de ella; porque muy bien podemos conquistarla!
Empero no os rebeléis contra Jehová, ni temáis al pueblo de esa tierra, porque no son más que pan para nosotros: su amparo se ha apartado de ellos, mientras que Jehová es con nosotros; no los temáis.
¶Por lo cual, alzad las manos que están caídas, y fortaleced las rodillas que titubean;
Ahora bien, dame esta montaña de la cual habló Jehová en aquel día. Porque tú oíste decir en aquel día, que los Anaceos estaban allí, con ciudades grandes e inexpugnables. Jehová tal vez estará conmigo, de manera que yo pueda desposeerlos, como dijo Jehová.
Dijo pues Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos, quizá obrará Jehová juntamente con nosotros; porque para con Jehová no hay estorbo en salvar por muchos o por pocos.
Entonces respondió uno de los mancebos y dijo: He aquí, he visto a un hijo de Isaí bet-lehemita, que es hábil en tañer, y poderoso en valor, y hombre de guerra, y entendido en negocios, y de varonil hermosura, y Jehová es con él.
Y fueron oídas las palabras que habló David, y refiriéronlas delante de Saúl, el cual le hizo llamar.