Quizá oirá Jehová tu Dios todas las palabras de Rabsaces, a quien su amo, el rey de Asiria, ha enviado para vituperar al Dios vivo; y reprenderá las palabras que ha oído Jehová tu Dios: haz pues oración a favor del resto que aún nos queda.
1 Samuel 17:26 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Entonces habló David a los hombres que estaban junto a él, diciendo: ¿Qué se ha de hacer al hombre que matare a aquel filisteo, y quitare este oprobio de Israel? porque ¿quién es este filisteo incircunciso para que afrente las huestes del Dios vivo? Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Entonces habló David a los que estaban junto a él, diciendo: ¿Qué harán al hombre que venciere a este filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para que provoque a los escuadrones del Dios viviente? Biblia Nueva Traducción Viviente David les preguntó a los soldados que estaban cerca de él: —¿Qué recibirá el hombre que mate al filisteo y ponga fin a su desafío contra Israel? Y a fin de cuentas, ¿quién es este filisteo pagano, al que se le permite desafiar a los ejércitos del Dios viviente? Biblia Católica (Latinoamericana) David preguntó a los hombres que estaban a su rededor: '¿Qué le harán al que venza a ese filisteo y logre vengar el insulto que se hace a Israel? ¡Quién es ese filisteo incircunciso para que insulte así a las tropas del Dios vivo!' La Biblia Textual 3a Edicion Y preguntó David a los varones que estaban junto a él, diciendo: ¿Qué se hará al varón que mate a ese filisteo y quite la afrenta de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso para que afrente a los escuadrones del Dios viviente? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Preguntó David a los hombres que estaban a su lado: '¿Qué se hará con el que mate a este filisteo y haga desaparecer de Israel esta afrenta? ¿Quién es ese filisteo incircunciso, para desafiar así a las huestes del Dios vivo?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces habló David a los que junto a él estaban, diciendo: ¿Qué harán al hombre que venciere a este filisteo, y quitare el oprobio de Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para que provoque a los escuadrones del Dios viviente? |
Quizá oirá Jehová tu Dios todas las palabras de Rabsaces, a quien su amo, el rey de Asiria, ha enviado para vituperar al Dios vivo; y reprenderá las palabras que ha oído Jehová tu Dios: haz pues oración a favor del resto que aún nos queda.
Escribió también cartas para vituperar a Jehová, el Dios de Israel, y para hablar contra él, diciendo: ¡Como los dioses de las naciones de las otras tierras, que no han librado a su pueblo de mi mano, así tampoco el Dios de Ezequías librará a su pueblo de mi mano!
Yo pues les dije: No es bueno esto que hacéis. ¿Acaso no debéis andar en el temor de nuestro Dios, por causa de la afrenta de los paganos, enemigos nuestros?
Nos haces objeto de vituperio a nuestros vecinos, el escarnio y la burla de los que están en derredor nuestro.
¡Acuérdate de esto, que el enemigo ha afrentado a Jehová, y que un pueblo insensato ha blasfemado tu nombre!
y devuelve a nuestros vecinos en su mismo seno, con los siete tantos, la deshonra con que te han deshonrado, oh Jehová!
¿A quién has vituperado y blasfemado? ¿y contra quién has alzado la voz y levantado en alto tus ojos? ¡contra el Santo de Israel!
¡Pero Jehová es el verdadero Dios; es el Dios vivo, y el Rey eterno! ¡a causa de su ira se estremece la tierra, y las naciones no pueden soportar su indignación!
He aquí que vienen días, dice Jehová, en que castigaré a los circuncisos con los incircuncisos:
a Egipto, y a Judá, y a Edom, y a los hijos de Ammón y a Moab, y a todos los que cortan los bordes de su cabello, habitadores del desierto: porque todas estas naciones son incircuncisas, y la casa de Israel es incircuncisa de corazón.
Morirás de la muerte de los incircuncisos, por mano de los extraños; porque yo lo he dicho, dice Jehová el Señor.
Antes bien, contra el Señor del cielo te has ensalzado; de tal modo que han traído los vasos de su Casa delante de ti, y tú, y tus grandes, y tus mujeres, y tus concubinas estáis bebiendo en ellos; también a dioses de plata y de oro, de bronce, de hierro, de madera y de piedra, que no ven ni oyen, y que nada saben, los has alabado; mas al Dios en cuya mano está tu aliento, y cuyos son todos tus caminos, no le has glorificado.
Él salva y él libra; él también hace señales y maravillas en el cielo y en la tierra; el cual ha librado a Daniel del poder de los leones.
¡Oh Señor, conforme a todas tus justicias, apártese, te ruego, tu ceño y tu ardiente indignación de sobre tu ciudad de Jerusalem, tu santo monte; porque a causa de nuestros pecados, y de las iniquidades de nuestros padres Jerusalem y tu pueblo han venido a ser el oprobio de todos los que están en derredor nuestro.
y responderá Jehová, y dirá a su pueblo: He aquí, yo os enviaré trigo y vino y aceite, y os saciaréis de ello; y no os pondré más por oprobio entre las naciones.
¿Porque quién hay de toda carne que haya oído la voz del Dios vivo hablando de en medio del fuego, como nosotros, y haya vivido?
porque ellos mismos declaran respecto de nosotros, qué manera de entrada tuvimos a vosotros, y cómo os volvisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero,
Y les dijo Josué: En esto conocenéis que el Dios vivo está en medio de vosotros, y que infaliblemente desposeerá de delante de vosotros al Cananeo, y al Heteo, y al Heveo, y al Perezeo, y al Gergeseo, y al Amorreo y al Jebuseo.
Sabemos empero que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento, para que conozcamos a aquel que es verdadero; y nosotros estamos en el que es verdadero, es decir, en su Hijo Jesucristo. Éste es el verdadero Dios y la vida eterna.
Y les dijo Nahás ammonita: Con esta condición celebraré pacto con vosotros; a saber, conque se os saque a todos el ojo derecho, para que yo lo ponga por vituperio contra todo Israel.
Dijo pues Jonatán a su paje de armas: Ven, pasemos a la guarnición de estos incircuncisos, quizá obrará Jehová juntamente con nosotros; porque para con Jehová no hay estorbo en salvar por muchos o por pocos.
Dijo además el filisteo: ¡Yo desafío a los escuadrones de Israel el día de hoy! dadme un hombre, para que peleemos los dos.
Apartóse pues de su lado hacia otro, y preguntó del mismo modo; y el pueblo le volvió respuesta como de primero.
Fuese león, fuese oso, tu siervo le hería; y será aquel filisteo incircunciso como uno de ellos, porque ha afrentado los escuadrones del Dios vivo.
Entonces dijo Saúl a su paje de armas: Saca tu espada, y traspásame con ella; no sea que vengan estos incircuncisos, y me traspasen, y sacien su venganza en mí. Mas no quiso su paje de armas, porque tuvo gran temor: por lo cual tomó Saúl su espada, y cayó sobre ella.