De modo que arrojó al hombre, y colocó al frente del jardín de Edén los querubines y una espada de fuego que daba vueltas por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.
1 Samuel 10:23 - Biblia Version Moderna (1929) Entonces corrieron, y le trajeron de allí; y al presentarse en medio del pueblo, descollaba entre todo el pueblo de los hombros arriba. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Entonces corrieron y lo trajeron de allí; y puesto en medio del pueblo, desde los hombros arriba era más alto que todo el pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que lo encontraron y lo sacaron. Era tan alto que los demás apenas le llegaban al hombro. Biblia Católica (Latinoamericana) Corrieron allá y lo trajeron para presentarlo al pueblo: ¡era más alto que todo el mundo por una cabeza! La Biblia Textual 3a Edicion Y corrieron y lo sacaron de allí; y cuando se presentó en medio del pueblo, se vio que desde sus hombros hacia arriba era más alto que todo el pueblo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Fueron en seguida a sacarlo de allí. Y cuando estuvo en medio del pueblo, aventajaba en estatura a toda la gente de los hombros para arriba. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces corrieron, y lo trajeron de allí, y puesto en medio del pueblo, desde los hombros arriba era más alto que todo el pueblo. |
De modo que arrojó al hombre, y colocó al frente del jardín de Edén los querubines y una espada de fuego que daba vueltas por todos lados, para guardar el camino del árbol de la vida.
Más Jehová dijo a Samuel: No mires a su buen parecer, ni a lo elevado de su estatura; porque le he rechazado: porque no lo que mira el hombre es lo importante; porque el hombre mira a los ojos, mas Jehová mira al corazón.
Y salió un campeón del ejército de los Filisteos, llamado Goliat, natural de Gat; cuya estatura era de seis codos y un palmo.
HABÍA entonces un hombre de Benjamín, que se llamaba Cis, hijo de Abiel, hijo de Zeror, hijo de Becorat, hijo de Afía, benjamita, hombre esforzado y valeroso;
el cual tenía un hijo que se llamaba Saúl, mancebo gallardo y hermoso: no había entre los hijos de Israel hombre de mejor presencia que él: desde los hombros arriba descollaba sobre todo el pueblo.