Διαδικτυακή Βίβλος

Διαφημίσεις


Ολόκληρη η Βίβλος Παλαιά Διαθήκη Καινή Διαθήκη




1 Corintios 7:4 - Biblia Version Moderna (1929)

La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; y de misma manera, el marido no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer.

Δείτε το κεφάλαιο
προβολή Interlinear Bible

Περισσότερες εκδόσεις

Biblia Reina Valera 1960

La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; ni tampoco tiene el marido potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Nueva Traducción Viviente

La esposa le da la autoridad sobre su cuerpo a su marido, y el esposo le da la autoridad sobre su cuerpo a su esposa.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Católica (Latinoamericana)

La esposa no dispone de su cuerpo, sino el marido. Igualmente el marido no dispone de su cuerpo, sino la esposa.

Δείτε το κεφάλαιο

La Biblia Textual 3a Edicion

La mujer no tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino el marido; e igualmente tampoco el marido tiene potestad sobre su propio cuerpo, sino la mujer.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Serafín de Ausejo 1975

La mujer no es dueña de su propio cuerpo, sino el marido; lo mismo que el marido no es dueño de su propio cuerpo, sino la mujer.

Δείτε το κεφάλαιο

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

La esposa no tiene potestad de su propio cuerpo, sino el marido; e igualmente tampoco el marido tiene potestad de su propio cuerpo, sino la esposa.

Δείτε το κεφάλαιο
Άλλες μεταφράσεις



1 Corintios 7:4
5 Σταυροειδείς Αναφορές  

Y le dije: Muchos días me aguardarás; no cometerás fornicación, ni tampoco te casarás; y lo mismo haré yo para contigo.


Y yo os digo, que el que repudiare a su mujer, salvo por causa de fornicación, y se casare con otra, comete adulterio; y el que se casare con la repudiada, comete adulterio.


Pague el marido a su mujer el débito conyugal, y asimismo la mujer a su marido.


No os defraudéis el uno al otro, a no ser con mutuo consentimiento, por algún tiempo, para dedicaros enteramente a la oración; y volved a estar juntos, no sea que os tiente Satanás por medio de vuestra incontinencia.