y el rey les comentó: «En ningún lado vamos a encontrar a nadie más inteligente que este joven».
Números 27:18 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Entonces Dios le ordenó a Moisés: —Llama a Josué, que es un hombre valiente y me obedece; llévalo ante el sacerdote Eleazar y ante todo el pueblo, y en presencia de ellos pon tus manos sobre su cabeza. Así le pasarás tu autoridad y lo harás jefe principal del pueblo. Yo le diré por medio de Eleazar lo que debe hacer como jefe del ejército israelita. Ordénales a los israelitas que deben obedecer a Josué en todo. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová dijo a Moisés: Toma a Josué hijo de Nun, varón en el cual hay espíritu, y pondrás tu mano sobre él; Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor le respondió: —Toma a Josué, hijo de Nun, en quien está el Espíritu, y pon tus manos sobre él. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé respondió a Moisés: 'Llama a Josué, hijo de Nun, hombre en que está el Espíritu, y pon tu mano sobre él. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH respondió a Moisés: Toma a Josué° ben Nun, varón en el cual hay espíritu, e impondrás tu mano sobre él, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh dijo a Moisés: 'Toma a Josué, hijo de Nun, hombre en quien está el espíritu, y pon tu mano sobre él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová dijo a Moisés: Toma a Josué, hijo de Nun, varón en el cual está el Espíritu, y pondrás tu mano sobre él; |
y el rey les comentó: «En ningún lado vamos a encontrar a nadie más inteligente que este joven».
Allí Moisés le dijo a Josué: «Elige a algunos hombres, y sal a pelear contra los amalecitas. Mañana yo estaré en lo alto del cerro, sosteniendo en la mano la vara que Dios me dio para castigar a los egipcios».
Según me contaron, en ti vive el espíritu del Dios único, y por eso eres muy inteligente y sabio.
Yo bajaré entonces y te hablaré. Pondré en los ancianos una parte del espíritu que está en ti, para que te ayuden a dirigir al pueblo; así no tendrás que hacerlo todo.
A Oseas hijo de Nun, Moisés le cambió el nombre y le puso Josué. Luego Moisés envió a los jefes israelitas a explorar el territorio de Canaán. Les dijo: «Vayan por el desierto hasta llegar a las montañas.
ya que cuando el Hijo habla, el que habla es Dios mismo, porque Dios le ha dado todo el poder de su Espíritu.
Todos siguieron orando y ayunando; después oraron por Bernabé y Saulo, les pusieron las manos sobre la cabeza, y los despidieron.
Pablo puso sus manos sobre la cabeza de esos doce hombres y, en ese momento, el Espíritu Santo vino sobre ellos. Entonces comenzaron a hablar en idiomas extraños y dieron mensajes de parte de Dios.
Elijan con cuidado a siete hombres, para que se encarguen de ese trabajo. Tienen que ser personas en las que todos ustedes confíen, que hagan lo bueno y sean muy sabios, y que tengan el poder del Espíritu Santo.
Luego los llevaron ante los apóstoles, y estos pusieron sus manos sobre la cabeza de cada uno y oraron.
»Por culpa de ustedes, Dios se enojó conmigo y me dijo: “Tampoco tú entrarás a esta tierra.
»A Josué le dije que no tuviera miedo, pues había sido testigo de cómo Dios venció a aquellos dos reyes. También le dije que Dios lo haría vencer a todos los reinos por los que tuviera que pasar, porque Dios mismo pelearía por los israelitas.
Luego me pidió que instruyera y animara a Josué, porque él guiaría a Israel en la conquista de todo aquel territorio.
Después de esto, Dios le dijo a Moisés: «Ya se acerca el día de tu muerte. Por eso quiero que tú y Josué vengan al santuario, para que yo les diga lo que deben hacer». Moisés y Josué fueron al santuario,
A Josué, Dios le dijo: «Tú, Josué, tienes que ser fuerte y valiente. Yo te ayudaré en todo, y tú harás que este pueblo conquiste el territorio que les he prometido».
Pero él mismo los guiará, y destruirá a todos los países que ustedes encuentren a su paso. Así el territorio será de ustedes. Además, Dios ha ordenado que Josué sea su nuevo jefe.
Antes de morir, Moisés había puesto sus manos sobre la cabeza de Josué y Dios lo llenó de sabiduría. Por eso los israelitas obedecieron a Josué, y cumplieron con las órdenes que Dios le había dado a Moisés.
No dejes de usar las capacidades especiales que Dios te dio cuando los líderes de la iglesia pusieron sus manos sobre tu cabeza. El Espíritu Santo habló con ellos y les ordenó hacerlo.
Antes de nombrar a alguien para el servicio a Dios, piénsalo bien. Porque, si esa persona hace algo malo, tú serás también responsable de lo que haga. Tú mismo debes apartarte del mal.
y que debemos bautizarnos; también sabemos que los que creen en Cristo reciben el Espíritu Santo, que los muertos volverán a vivir, y que habrá un juicio final.
Te obedeceremos en todo, como obedecimos a Moisés, siempre y cuando nuestro Dios, te apoye como apoyó a Moisés.
Después de esto el espíritu de Dios actuó sobre Jefté, y lo hizo recorrer los territorios de Galaad y Manasés, y volver después a Mispá de Galaad. De allí Jefté fue al territorio de los amonitas,
El espíritu de Dios actuó sobre Otoniel, y este guio a los israelitas en su lucha contra Cusán-risataim. Así Dios ayudó a Otoniel a derrotar a su enemigo.
Uno de ellos le dijo: —Yo conozco a uno. Se llama David, y es hijo de Jesé, el que vive en Belén. David toca muy bien el arpa, y es también un guerrero muy valiente; además, sabe hablar bien y es muy bien parecido. ¡Y Dios siempre lo ayuda!