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Números 21:2 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Entonces los israelitas oraron a Dios y le hicieron esta promesa: «Si nos ayudas a vencer a ese rey y a su pueblo, nosotros destruiremos por completo todas sus ciudades».

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Biblia Reina Valera 1960

Entonces Israel hizo voto a Jehová, y dijo: Si en efecto entregares este pueblo en mi mano, yo destruiré sus ciudades.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces Israel hizo un voto al Señor: «Si entregas a este pueblo en nuestras manos, destruiremos por completo todas sus ciudades».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Entonces Israel hizo un voto a Yavé: 'Si me entregas a ese pueblo, condenaré sus ciudades al anatema.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Entonces Israel hizo voto a YHVH, y dijo: Si en verdad entregas a este pueblo en mi mano, yo destruiré por completo sus ciudades.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Entonces Israel hizo este voto a Yahveh diciendo: 'Si entregas a este pueblo en mis manos, entregaré sus ciudades al anatema'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Entonces Israel hizo voto a Jehová, y dijo: Si en efecto entregares a este pueblo en mi mano, yo destruiré sus ciudades.

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Números 21:2
15 Σταυροειδείς Αναφορές  

Después Jacob hizo esta promesa: «Si Dios me acompaña y me cuida en este viaje, y me da comida y ropa,


En los patios de tu templo, en el centro de Jerusalén, y en presencia de todo tu pueblo, te cumpliré mis promesas. ¡Alabemos a nuestro Dios!


Si alguien no ama al Señor Jesucristo, que la maldición de Dios caiga sobre él. Yo, por mi parte, oro al Señor Jesucristo y le digo: «¡Ven, Señor nuestro!»


Cuando Dios ponga a esas naciones bajo el dominio de ustedes, no les tengan compasión ni hagan ningún trato con ellas; ¡destrúyanlas por completo!


La ciudad y todos sus habitantes serán destruidos por completo, como una ofrenda para Dios. Pero acuérdense de no hacerles daño ni a Rahab ni a su familia, porque ella escondió a los espías que enviamos.


Después de la destrucción de Jericó, Josué les advirtió a los israelitas: «Nadie deberá edificar de nuevo la ciudad de Jericó. Cualquiera que trate de hacerlo caerá bajo un terrible castigo de Dios. Si alguien intenta reconstruirla, Dios hará que mueran todos los hijos de esa persona».


en donde le prometió a Dios: «Si me das la victoria sobre los amonitas,


y le hizo esta promesa: «Dios todopoderoso, yo soy tu humilde servidora. Mira lo triste que estoy. Date cuenta de lo mucho que sufro; no te olvides de mí. Si me das un hijo, yo te lo entregaré para que te sirva solo a ti todos los días de su vida. Como prueba de que te pertenece, nunca se cortará el cabello».