»Adórenme, pues yo soy su Dios. Yo los bendeciré con abundantes alimentos. Nunca dejaré que se enfermen
Lucas 4:4 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Jesús le contestó: —La Biblia dice: “No solo de pan vive la gente”. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús le dijo: —¡No! Las Escrituras dicen: “La gente no vive solo de pan” . Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús le contestó: 'Dice la Escritura: El hombre no vive solamente de pan. La Biblia Textual 3a Edicion Jesús le respondió:° Está escrito: No sólo de pan vivirá el hombre.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Jesús le contestó: 'Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jesús, respondiéndole, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra de Dios. |
»Adórenme, pues yo soy su Dios. Yo los bendeciré con abundantes alimentos. Nunca dejaré que se enfermen
Pero sepan que yo cuidaré de sus huérfanos y de sus viudas; ¡pueden confiar en mí!»
Jesús le contestó: —La Biblia dice: “No solo de pan vive la gente; también necesita obedecer todo lo que Dios manda.”
»Ya no se preocupen por lo que van a comer, o lo que van a beber, o por la ropa que se van a poner.
Luego, Jesús les preguntó a sus discípulos: —¿Recuerdan cuando los envié a anunciar las buenas noticias y les dije que no llevaran dinero, ni mochila ni sandalias? Díganme, ¿les hizo falta algo? Ellos le respondieron: —No Señor, nada nos faltó.
Entonces el diablo le dijo: —Si en verdad eres el Hijo de Dios, ordena que estas piedras se conviertan en pan.
Jesús le respondió: —La Biblia dice: “Adoren a Dios, y obedézcanlo solo a él.”
Que la salvación los proteja como un casco, y que los defienda la palabra de Dios, que es la espada del Espíritu Santo.
Los ha hecho pasar hambre, pero les ha dado a comer pan del cielo, un alimento que ni ustedes ni sus antepasados conocieron. Con esto Dios quiso enseñarles que, aunque les falte el alimento, pueden confiar en sus promesas y en su palabra, y tener vida.