»En Jerusalén los pecadores tiemblan, los malvados se llenan de miedo y gritan: “No podremos sobrevivir al fuego destructor de Dios; ¡ese fuego no se apaga y no quedaremos con vida!”»
Levítico 13:57 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Si más tarde vuelve a aparecer la mancha en el objeto, este deberá ser quemado. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y si apareciere de nuevo en el vestido, la urdimbre o trama, o en cualquiera cosa de cuero, extendiéndose en ellos, quemarás al fuego aquello en que estuviere la plaga. Biblia Nueva Traducción Viviente Si la mancha reaparece en la prenda de vestir, en la tela o en el artículo de cuero, es evidente que el moho está extendiéndose, y el objeto contaminado tendrá que ser quemado; Biblia Católica (Latinoamericana) Pero si vuelve a aparecer en el vestido, en la urdimbre o en la trama, en el objeto de cuero, ha vuelto la lepra, por lo que quemarás el objeto que está afectado. La Biblia Textual 3a Edicion Pero si reaparece en el vestido o en el tejido, o en el punto, o en cualquier objeto de cuero, se está esparciendo. Quemarás al fuego aquello en lo cual está la infección. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si la mancha reaparece en el vestido, sea en el tejido, en la urdimbre o en el objeto de cuero, es señal de contagio: quemarás la parte en que aparece la mancha. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y si apareciere más en el vestido, o estambre, o trama, o en cualquiera cosa de pieles, extendiéndose en ella, quemarás en el fuego aquello donde estuviere la plaga. |
»En Jerusalén los pecadores tiemblan, los malvados se llenan de miedo y gritan: “No podremos sobrevivir al fuego destructor de Dios; ¡ese fuego no se apaga y no quedaremos con vida!”»
»Si al lavar la prenda, la mancha pierde su color, el sacerdote deberá cortar el pedazo de tela o cuero manchado.
Pero si la mancha desaparece por completo, el objeto volverá a lavarse y se declarará puro.
»El rey se enojó mucho, y envió a sus soldados para que mataran a esos invitados y quemaran la ciudad donde vivían.
»Luego les diré a los malvados: “¡Aléjense de mí! Lo único que pueden esperar de Dios es castigo. Váyanse al fuego que nunca se apaga, al fuego que Dios preparó para el diablo y sus ayudantes.
El que viene después de mí separará a los buenos de los malos. A los buenos los pondrá a salvo, pero a los malos los echará en un fuego que nunca se apaga.»
»Si alguno de ustedes llega a tener una infección en la piel, deberá presentarse ante los sacerdotes. Ellos saben lo que debe hacerse en estos casos, así que ustedes deben seguir sus instrucciones.
Pero nunca entrará en ella nada que desagrade a Dios; no entrarán los que han adorado a dioses falsos, ni los objetos que hayan usado en su culto. Solo podrán entrar los que tengan anotados sus nombres en el libro del Cordero. En ese libro están anotados los que recibirán la vida eterna.
Pero a los cobardes, a los que no confíen en mí, a los que hagan cosas terribles que no me agradan, a los que hayan matado a otros, a los que tengan relaciones sexuales prohibidas, a los que practiquen la brujería, a los que adoren dioses falsos, y a los mentirosos, los lanzaré al lago donde el azufre arde en llamas; y allí se quedarán, separados de mí para siempre.»