En el campo vio un pozo, del cual bebía agua el ganado. Junto al pozo descansaban tres rebaños de ovejas. El pozo estaba tapado con una gran piedra,
Génesis 29:3 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual y solo se les daba agua a las ovejas cuando todos los pastores habían reunido a sus rebaños. Después de eso, volvían a tapar el pozo. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y juntaban allí todos los rebaños; y revolvían la piedra de la boca del pozo, y abrevaban las ovejas, y volvían la piedra sobre la boca del pozo a su lugar. Biblia Nueva Traducción Viviente Era costumbre del lugar esperar a que llegaran todos los rebaños antes de quitar la piedra y dar de beber a los animales. Después se volvía a tapar la boca del pozo con la piedra. Biblia Católica (Latinoamericana) Allí se juntaban todos los pastores, removían la piedra, sacaban agua para los rebaños y volvían a colocar la piedra sobre la boca del pozo. La Biblia Textual 3a Edicion Allí se juntaban todos los rebaños, y rodando la piedra de sobre la boca del pozo, abrevaban a las ovejas, tras de lo cual devolvían la piedra a su lugar, sobre la boca del pozo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Allí se juntaban todos los rebaños; se corría la piedra que había sobre la boca del pozo, se abrevaba el ganado y se volvía a colocar la piedra en su sitio sobre el brocal del pozo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y se juntaban allí todos los rebaños; y revolvían la piedra de sobre la boca del pozo, y abrevaban las ovejas; y volvían la piedra sobre la boca del pozo a su lugar. |
En el campo vio un pozo, del cual bebía agua el ganado. Junto al pozo descansaban tres rebaños de ovejas. El pozo estaba tapado con una gran piedra,
Jacob se acercó a los pastores que allí estaban y les preguntó de dónde eran. Cuando le dijeron que eran de Harán,
Pero ellos respondieron: —No debemos darles agua todavía. Siempre esperamos a que todos los rebaños estén juntos, para destapar el pozo y darles de beber.
También llegaron unos pastores y les dijeron a las muchachas que se fueran de allí. Pero Moisés las defendió, y dio de beber a las ovejas.
Tú eres un jardín cerrado, amada mía; eres un jardín cerrado, ¡eres sellado manantial!
¡En todo rincón de la ciudad el pueblo celebra los triunfos de Dios, y las victorias de su pueblo Israel!