Pero al fin de esos cuatrocientos años, tus descendientes podrán volver a este país, pues los amorreos que ahora lo ocupan son tan malvados que en ese tiempo los expulsaré».
Génesis 15:13 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual pero Dios le dijo: «Quiero que sepas que tus descendientes irán a vivir a un país extranjero. Allí los harán trabajar como esclavos, y los maltratarán durante cuatrocientos años. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí, y será oprimida cuatrocientos años. Biblia Nueva Traducción Viviente Después el Señor dijo a Abram: «Ten por seguro que tus descendientes serán extranjeros en una tierra ajena, donde los oprimirán como esclavos durante cuatrocientos años; Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Yavé le dijo: 'Debes saber desde ahora que tus descendientes serán forasteros en una tierra que no es suya. Los esclavizarán y los explotarán durante cuatrocientos años. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo a Abram: Sabe por cierto que tu simiente será forastera en una tierra no suya (y allí será esclavizada y será oprimida) cuatrocientos años.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo Yahveh a Abrán: 'Has de saber que tu posteridad será extranjera en un país que no será el suyo; la someterán a servidumbre y la oprimirán por cuatrocientos años. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces dijo a Abram: Ten por cierto que tu simiente será peregrina en tierra no suya, y servirá a los de allí y será afligida por cuatrocientos años. |
Pero al fin de esos cuatrocientos años, tus descendientes podrán volver a este país, pues los amorreos que ahora lo ocupan son tan malvados que en ese tiempo los expulsaré».
Hemos venido a quedarnos aquí por algún tiempo, porque falta comida en Canaán y ya no tenemos pastos para nuestros ganados. Le rogamos a usted que nos deje vivir en Gosen.
Dios nunca se olvidó de la promesa que él mismo le hizo a Abraham, su servidor.
Para humillar a los israelitas, los egipcios los pusieron a las órdenes de capataces, y los obligaron a construir las ciudades de Pitón y Ramsés. En esas ciudades el rey de Egipto guardaba sus provisiones.
que los trataban con mucha crueldad y los hacían trabajar muy duro. Hasta los pusieron a mezclar barro para hacer ladrillos, y también a trabajar en el campo.
Pero Dios vio sus sufrimientos y escuchó sus gritos de dolor, y se acordó del pacto que había hecho con los antepasados de los israelitas, es decir, con Abraham, Isaac y Jacob.
21 (20) »No maltraten a los refugiados en el país, ni los hagan esclavos. Recuerden que también ustedes fueron extranjeros en Egipto.
»No maltraten ni esclavicen al refugiado, pues ustedes también fueron extranjeros en Egipto, y ya saben lo que es vivir como esclavos en otro país.
Así que prepárate, pues voy a mandarte a hablar con el rey de Egipto, para que saques de ese país a mi pueblo.
Diles que les prometo librarlos de su esclavitud, sacarlos de Egipto, y llevarlos a Canaán, país donde viven pueblos que no me conocen. ¡Es un país tan rico que siempre hay abundancia de alimentos!
Trátenlos como si fueran israelitas, y ámenlos como si fueran ustedes mismos, pues también ustedes fueron extranjeros en Egipto. Yo soy el Dios de Israel.
Hace mucho tiempo, nuestros familiares se fueron a vivir a Egipto. Pero los egipcios los trataron muy mal, lo mismo que a nosotros.
»Pasó el tiempo, y a Dios le pareció bien cumplir la promesa que le había hecho a Abraham. Mientras tanto, en Egipto, cada vez había más y más israelitas.
Lo que quiero decir es esto: la promesa de Dios no puede cambiarla, ni dejarla sin valor, una ley que Dios dio cuatrocientos treinta años después.
Así que muestren amor a los refugiados, porque también ustedes fueron refugiados en Egipto.
Así que deben recordar que ustedes también fueron esclavos en Egipto, y que yo los saqué de allí haciendo uso de mi gran poder. Por eso les ordeno tomar el día séptimo como día de descanso.