Ustedes, sus ángeles poderosos, que cumplen sus mandatos y llevan a cabo sus órdenes, ¡alaben a mi Dios!
Daniel 11:1 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Y aquel personaje siguió diciendo: «Durante el primer año del reinado de Darío en Media, yo le brindé mi ayuda y mi apoyo. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y yo mismo, en el año primero de Darío el medo, estuve para animarlo y fortalecerlo. Biblia Nueva Traducción Viviente He acompañado a Miguel para apoyarlo y fortalecerlo desde el primer año del reinado de Darío el medo). Biblia Católica (Latinoamericana) Has de saber que el primer año de Darío, el Medo, estaba yo cerca de él ayudándolo y animándole.
Y ahora te revelaré la verdad: La Biblia Textual 3a Edicion Yo, por mi parte, en el año primero de Darío el medo, me puse a su lado para apoyarlo y fortalecerlo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 que estaba allí para fortalecerme y sostenerme'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y en el año primero de Darío el medo, yo estuve para animarlo y fortalecerlo. |
Ustedes, sus ángeles poderosos, que cumplen sus mandatos y llevan a cabo sus órdenes, ¡alaben a mi Dios!
31 (6.1) Así Darío llegó a ser rey de los medos. Cuando esto sucedió, Darío tenía sesenta y dos años.
1 (2) Para mantener el control de su reino, Darío nombró a ciento veinte personas que le ayudaban a gobernar.
Daniel también escribió: «Un día, yo estaba leyendo el libro del profeta Jeremías. Cuando llegué al pasaje donde Dios le anuncia al profeta que Jerusalén quedaría destruida durante setenta años, decidí ayunar. Luego me vestí con ropas ásperas, me senté sobre ceniza, y comencé a pedirle a Dios por mi pueblo. Cuando esto sucedió, el rey Darío llevaba un año de reinar sobre los babilonios. Darío era hijo del rey Asuero, y pertenecía al pueblo de los medos. »Yo le dije a Dios en mi oración: “Dios mío, tú eres grande y poderoso. Tú siempre cumples lo que prometes, y muestras tu amor a quienes te aman y te obedecen. Por eso, tengo que reconocer
Allí visitaron a los que habían creído en Jesús, y les recomendaron que siguieran confiando en él. También les dijeron: «Debemos sufrir mucho antes de entrar en el reino de Dios».