28 (29) Cuando toda mi familia merecía haber muerto, usted me sentó a su mesa y me trató como si fuera de su familia. Yo no me atrevo a pedirle a usted nada, pues solo soy un sirviente.
2 Samuel 19:29 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual 29 (30) El rey le contestó: —¡No digas más! He decidido que tú y Sibá se repartan las tierras que fueron de Saúl. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y el rey le dijo: ¿Para qué más palabras? Yo he determinado que tú y Siba os dividáis las tierras. Biblia Nueva Traducción Viviente —Ya dijiste suficiente —respondió David—. He decidido que tú y Siba se dividan tu tierra en partes iguales. Biblia Católica (Latinoamericana) La familia de mi padre sólo podía esperar del rey mi señor la muerte y sin embargo tú me has puesto entre los que comen a tu mesa. ¿Con qué derecho podría pedirle ahora algo al rey?' La Biblia Textual 3a Edicion A lo cual le respondió el rey: ¿Por qué insistes en tus asuntos? Ya he dicho que tú y Siba os dividáis las tierras. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque todos los de la casa de mi padre eran dignos de muerte ante mi señor, el rey; pero tú has puesto a tu siervo entre los comensales de tu mesa. ¿Qué más justicia puedo yo reclamar al rey?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el rey le dijo: ¿Para qué hablas más palabras? Yo he determinado que tú y Siba os repartáis las tierras. |
28 (29) Cuando toda mi familia merecía haber muerto, usted me sentó a su mesa y me trató como si fuera de su familia. Yo no me atrevo a pedirle a usted nada, pues solo soy un sirviente.
30 (31) Pero Mefi-bóset respondió: —Sibá puede quedarse con todo. Para mí, lo mejor es que Su Majestad haya vuelto sano y salvo a su palacio.
Entonces llamaron a Sibá, que había estado al servicio de Saúl. Cuando Sibá llegó a la presencia de David, este le dijo: —¿Eres tú Sibá? Y él respondió: —Para servir a Su Majestad.
David le dijo: —No tengas miedo, en memoria de tu padre Jonatán, voy a cuidar de ti. Voy a devolverte todas las tierras de tu abuelo Saúl, y de ahora en adelante comerás en mi mesa.
Entonces el rey llamó a Sibá y le dijo: —Todo lo que antes fue de Saúl y de su familia, voy a dárselo a Mefi-bóset.
Destruiré por completo al que hable mal de su amigo; no soportaré a mi lado al que se crea más importante y más inteligente que los demás.
«¿Hasta cuándo seguirán ustedes siendo injustos en sus juicios, y defendiendo a los malvados?
Este es un asunto de palabras, de nombres y de la ley de ustedes, así que arréglenlo ustedes. Yo, en estas cuestiones, no me meto.