28 (29) el desconocido dijo: —Ya no te vas a llamar Jacob. Ahora vas a llamarte Israel, porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido.
1 Samuel 26:25 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual —David, hijo mío, ¡bendito seas! Yo sé que te irá bien en todo lo que hagas. Y así David siguió su camino, y Saúl regresó a su casa. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y Saúl dijo a David: Bendito eres tú, hijo mío David; sin duda emprenderás tú cosas grandes, y prevalecerás. Entonces David se fue por su camino, y Saúl se volvió a su lugar. Biblia Nueva Traducción Viviente Y Saúl le dijo a David: —Bendiciones sobre tu vida, David, hijo mío. Harás muchas acciones heroicas y seguramente te irá bien en todo lo que hagas. Luego David se fue, y Saúl regresó a su casa. Biblia Católica (Latinoamericana) Saúl dijo a David: 'Bendito seas, hijo mío. Ciertamente te irá bien en todo lo que hagas'.
Después de eso, David siguió su camino y Saúl se regresó a su casa. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Saúl dijo a David: ¡Bendito seas tú, hijo mío David! Ciertamente serás poderoso y prevalecerás. Y David siguió por su camino y Saúl se volvió a su lugar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo entonces Saúl a David: '¡Bendito tú, hijo mío, David! En todo cuanto hagas ciertamente triunfarás'. Tomó luego David su camino, y Saúl se volvió a su lugar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Saúl dijo a David: Bendito eres tú, hijo mío David; sin duda ejecutarás tú grandes empresas, y prevalecerás. Entonces David se fue su camino, y Saúl se volvió a su lugar. |
28 (29) el desconocido dijo: —Ya no te vas a llamar Jacob. Ahora vas a llamarte Israel, porque has luchado con Dios y con los hombres, y has vencido.
No creas lo que te diga, pues te habla con dulzura pero busca hacerte daño.
Sin embargo, nadie ha hecho un arma capaz de destruirte. »Israel, tú harás callar a todo el que te acuse, porque yo, el único Dios, hago triunfar a los que me adoran. Te juro que así será».
¿Quién podrá separarnos del amor de Jesucristo? Nada ni nadie. Ni los problemas, ni los sufrimientos, ni las dificultades. Tampoco podrán hacerlo el hambre ni el frío, ni los peligros ni la muerte.
En medio de todos nuestros problemas, estamos seguros de que Jesucristo, quien nos amó, nos dará la victoria total.
19 (20) »Si alguien puede matar a su enemigo, no lo deja ir con vida. Por eso le pido a Dios que te recompense con muchas cosas buenas, por lo bien que hoy me has tratado.
20 (21) »Yo sé muy bien que llegarás a ser rey, y que al pueblo de Israel le irá muy bien contigo.
22 (23) David se lo juró a Saúl. Luego Saúl se regresó a su casa, y David y su gente volvieron a su escondite.