22 (23) Pero David dijo: —¡Tú no te metas, hijo de Seruiá! ¡Hasta parece que fueras mi enemigo! Hoy los israelitas me han reconocido como su rey, así que hoy nadie morirá.
1 Samuel 11:13 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Pero Saúl dijo: «Por esta vez no vamos a matar a nadie, porque hoy Dios nos ha librado de nuestros enemigos». Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y Saúl dijo: No morirá hoy ninguno, porque hoy Jehová ha dado salvación en Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero Saúl respondió: —Nadie será ejecutado hoy, ¡porque este día el Señor rescató a Israel! Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Samuel respondió: 'Hoy no morirá nadie, porque hoy es un día en que Yavé ha salvado a Israel'. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Saúl respondió: Ningún hombre será muerto en este día, porque YHVH ha dado hoy victoria en Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Saúl replicó: 'Nadie morirá en este día, puesto que Yahveh ha salvado hoy a Israel'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Saúl dijo: No morirá hoy ninguno, porque Jehová ha dado hoy salvación en Israel. |
22 (23) Pero David dijo: —¡Tú no te metas, hijo de Seruiá! ¡Hasta parece que fueras mi enemigo! Hoy los israelitas me han reconocido como su rey, así que hoy nadie morirá.
pero Eleazar se quedó matando filisteos hasta que el brazo se le acalambró. A pesar de eso, no soltó la espada. Cuando los soldados israelitas se dieron cuenta, regresaron a ayudarlo, pero solo encontraron soldados muertos; así que se apoderaron de las pertenencias de los filisteos. Ese día, Dios le dio una gran victoria a Israel.
Moisés les respondió: —¡Tranquilos, no tengan miedo! Ustedes no se preocupen, que van a ver cómo nuestro Dios los va a salvar. A esos egipcios que hoy ven, no volverán a verlos nunca más, porque Dios peleará por ustedes.
Así fue como aquel día Dios libró a los israelitas. Todos ellos pudieron ver los cuerpos muertos de los egipcios, tendidos a la orilla del mar.
Vio con sorpresa que esto a nadie le importaba. Entonces decidió usar su propio poder y así nos dio la salvación.
Sin embargo, Dios fue bueno conmigo, y por eso soy apóstol. No desprecié el poder especial que me dio, y trabajé más que los otros apóstoles; aunque en realidad todo lo hice gracias a ese poder especial de Dios.
Pero un grupo de malvados dijo en son de burla: «¿Y este es el que va a salvarnos?» Y como pensaban que Saúl no servía para rey, no le dieron ningún regalo. A pesar de ello, Saúl no dijo nada.
Pero la gente se opuso a Saúl: —De ninguna manera vamos a permitir que Jonatán muera. Gracias a él, y con la ayuda de Dios, Israel ha alcanzado una victoria total. Así fue como la gente le salvó la vida a Jonatán.
Recuerda que David arriesgó su vida cuando peleó contra Goliat y lo mató. Ese día Dios nos ayudó a vencer a los filisteos, y tú mismo estabas muy contento. ¿Cómo es posible que ahora quieras matar a David, si no ha hecho nada malo?