Yo mismo asolaré el país, de modo que queden de ello asombrados vuestros enemigos que en él se establezcan.
1 Samuel 31:7 - La Biblia Textual 3a Edicion Y cuando los hombres de Israel que estaban a lo largo del valle, al otro lado del Jordán, vieron que los de Israel habían huido y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron las ciudades y huyeron. Entonces fueron los filisteos y habitaron en ellas. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y los de Israel que eran del otro lado del valle, y del otro lado del Jordán, viendo que Israel había huido y que Saúl y sus hijos habían sido muertos, dejaron las ciudades y huyeron; y los filisteos vinieron y habitaron en ellas. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los israelitas que se encontraban al otro lado del valle de Jezreel y más allá del Jordán vieron que el ejército israelita había huido y que Saúl y sus hijos estaban muertos, abandonaron sus ciudades y huyeron. Entonces los filisteos entraron y ocuparon sus ciudades. Biblia Católica (Latinoamericana) Cuando se supo que los israelitas habían huido y que Saúl y sus hijos habían muerto, los israelitas que estaban al otro lado de la llanura y los que estaban a este lado del Jordán abandonaron sus ciudades y huyeron. Llegaron allí los filisteos y se instalaron en su lugar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando los hombres de Israel que estaban al otro lado del valle y más allá del Jordán se dieron cuenta de que los israelitas habían huido y que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron las ciudades y huyeron. Llegaron luego los filisteos y se instalaron en ellas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los de Israel que estaban al otro lado del valle, y al otro lado del Jordán, viendo que Israel había huido, y que Saúl y sus hijos habían muerto, dejaron las ciudades y huyeron; y los filisteos vinieron y habitaron en ellas. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Cuando los israelitas del otro lado del valle vieron que el ejército de Israel había huido, y que Saúl y sus hijos estaban muertos, también ellos huyeron y abandonaron sus ciudades, lo mismo que la gente que vivía más allá del río Jordán. Entonces llegaron los filisteos y ocuparon esas ciudades. |
Yo mismo asolaré el país, de modo que queden de ello asombrados vuestros enemigos que en él se establezcan.
Y en cuanto a los que queden de vosotros, infundiré tal cobardía en sus corazones en las tierras de sus enemigos, que el sonido de una hoja que se mueva los perseguirá, y huirán como se huye de la espada, y caerán sin que nadie los persiga.
Un pueblo que no conoces comerá del fruto de tu tierra y de todo tu trabajo, y no serás sino oprimido y quebrantado todos los días,
Y la mano de Madián prevaleció contra Israel. Y por causa de Madián los hijos de Israel prepararon las guaridas y cuevas que están en los montes, y los lugares fortificados.
Cuando los hombres de Israel se vieron en peligro (porque el pueblo estaba en grave aprieto), se ocultaron en cuevas, en matorrales, entre peñascos, en fosas y en cisternas.
Y algunos de los hebreos cruzaron el Jordán hacia la tierra de Gad y de Galaad, pero Saúl estaba aún en Gilgal, y todo el pueblo iba tras él temblando.
Aquel día, pues, murió Saúl con tres de sus hijos, su escudero, y todos sus hombres juntamente con él.
Al día siguiente aconteció que los filisteos fueron a despojar a los muertos, y hallaron a Saúl y a sus tres hijos tendidos en el monte Gilboa.