Éxodo 5:12 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

¹² Los israelitas recorrieron todo Egipto en busca de hierba seca, para usarla en lugar de la paja que antes les daban.

Více verzí

Biblia Reina Valera 1960

¹² Entonces el pueblo se esparció por toda la tierra de Egipto para recoger rastrojo en lugar de paja.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² Así que el pueblo se dispersó por todo Egipto en busca de hierba seca para usar como paja.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² El pueblo recorría todo el país de Egipto en busca de paja para machacar.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² Así el pueblo se esparció por toda la tierra de Egipto para recoger rastrojo que sirviera de paja.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² Entonces se dispersó el pueblo por todo Egipto buscando paja.

Éxodo 5:12 Křížové odkazy

1 Corintios 3:12

A partir de esa base podemos seguir construyendo con oro, plata, piedras preciosas, madera, paja o caña.

Abdías 1:18

»Así como el fuego quema la estopa, la gente de Edom será destruida por las doce tribus de Israel. ¡Nadie en Edom quedará con vida! Yo soy el Dios de Israel, y les juro que así será.

Joel 2:5

cuando saltan sobre los montes, el ruido que hacen se parece al que hacen los carros de guerra; son como el crujido de hojas secas que se queman en el fuego; son como un ejército poderoso que está listo para el ataque.

Isaías 47:14

Pero esos adivinos son como paja: el fuego los devorará y no podrán salvarse de las llamas. Ese fuego no será como el fuego de una chimenea que da calor al hogar.

Isaías 5:24

Rechazan la enseñanza del Dios santo de Israel; desprecian los mandamientos del Dios único y perfecto. Por eso, así como el fuego quema la paja así también desaparecerán ustedes: serán como plantas que se pudren de raíz y sus flores se convierten en polvo.

Éxodo 15:7

con tu fuerza lo derribaste, con tu enojo lo quemaste como paja.

Éxodo 5:11

sino que ustedes tienen que ir a buscarla y recogerla donde puedan. Pero deben entregar la misma cantidad de ladrillos de siempre».

Éxodo 5:13

Los capataces les decían: «¡Apúrense! Cada día tienen que entregar la misma cantidad de ladrillos que hacían cuando se les daba paja».