2 Crónicas 21 - Comentario Bíblico de Matthew Henry2 Crónicas 21Reinado de Joram de Judá(2 R. 8.16-24) 1 Durmió Josafat con sus padres, y lo sepultaron con sus padres en la ciudad de David. Y reinó en su lugar Joram su hijo, 2 quien tuvo por hermanos, hijos de Josafat, a Azarías, Jehiel, Zacarías, Azarías, Micael, y Sefatías. Todos estos fueron hijos de Josafat rey de Judá. 3 Y su padre les había dado muchos regalos de oro y de plata, y cosas preciosas, y ciudades fortificadas en Judá; pero había dado el reino a Joram, porque él era el primogénito. 4 Fue elevado, pues, Joram al reino de su padre; y luego que se hizo fuerte, mató a espada a todos sus hermanos, y también a algunos de los príncipes de Israel. 5 Cuando comenzó a reinar era de treinta y dos años, y reinó ocho años en Jerusalén. 6 Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, como hizo la casa de Acab; porque tenía por mujer a la hija de Acab, e hizo lo malo ante los ojos de Jehová. 7 Mas Jehová no quiso destruir la casa de David, a causa del pacto que había hecho con David, y porque le había dicho que le daría lámpara a él y a sus hijos perpetuamente. 8 En los días de este se rebeló Edom contra el dominio de Judá, y pusieron rey sobre sí. 9 Entonces pasó Joram con sus príncipes, y todos sus carros; y se levantó de noche, y derrotó a los edomitas que le habían sitiado, y a todos los comandantes de sus carros. 10 No obstante, Edom se libertó del dominio de Judá, hasta hoy. También en el mismo tiempo Libna se libertó de su dominio, por cuanto él había dejado a Jehová el Dios de sus padres. 11 Además de esto, hizo lugares altos en los montes de Judá, e hizo que los moradores de Jerusalén fornicasen tras ellos, y a ello impelió a Judá. 12 Y le llegó una carta del profeta Elías, que decía: Jehová el Dios de David tu padre ha dicho así: Por cuanto no has andado en los caminos de Josafat tu padre, ni en los caminos de Asa rey de Judá, 13 sino que has andado en el camino de los reyes de Israel, y has hecho que fornicase Judá y los moradores de Jerusalén, como fornicó la casa de Acab; y además has dado muerte a tus hermanos, a la familia de tu padre, los cuales eran mejores que tú; 14 he aquí Jehová herirá a tu pueblo de una gran plaga, y a tus hijos y a tus mujeres, y a todo cuanto tienes; 15 y a ti con muchas enfermedades, con enfermedad de tus intestinos, hasta que se te salgan a causa de tu persistente enfermedad. 16 Entonces Jehová despertó contra Joram la ira de los filisteos y de los árabes que estaban junto a los etíopes; 17 y subieron contra Judá, e invadieron la tierra, y tomaron todos los bienes que hallaron en la casa del rey, y a sus hijos y a sus mujeres; y no le quedó más hijo sino solamente Joacaz el menor de sus hijos. 18 Después de todo esto, Jehová lo hirió con una enfermedad incurable en los intestinos. 19 Y aconteció que al pasar muchos días, al fin, al cabo de dos años, los intestinos se le salieron por la enfermedad, muriendo así de enfermedad muy penosa. Y no encendieron fuego en su honor, como lo habían hecho con sus padres. 20 Cuando comenzó a reinar era de treinta y dos años, y reinó en Jerusalén ocho años; y murió sin que lo desearan más. Y lo sepultaron en la ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes. 2 Crónicas 212 Crónicas 21 - Introducción* El malvado reinado de Joram. (1-11) El miserable final de Joram. (12-20) 2 Crónicas 21:1-111-11 Joram odiaba a sus hermanos, y los mató, por la misma razón que Caín odiaba a Abel, y lo mató, porque su piedad condenó su impiedad. En el misterio de la Providencia, tales hombres a veces prosperan por un tiempo; pero el Señor tiene propósitos justos al permitir tales eventos, parte de los cuales ahora se pueden ver, y el resto se verá más adelante. 2 Crónicas 21:12-2012-20 Una advertencia de Dios fue enviada a Joram. El Espíritu de profecía podría ordenar a Elijah que prepare esta escritura en la previsión de los crímenes de Joram. Se le dice claramente que su pecado ciertamente lo arruinará. Pero no es de extrañar que los pecadores no estén asustados por el pecado, y al arrepentimiento, por las amenazas de la miseria en otro mundo, cuando la certeza de la miseria en este mundo, el hundimiento de sus propiedades y la ruina de su salud, no los frene. de cursos viciosos. Vea a Jehoram aquí despojado de todas sus comodidades. Así, Dios mostró claramente que la controversia estaba con él y su casa. Había matado a todos sus hermanos para fortalecerse; ahora, todos sus hijos son asesinados menos uno. La casa de David no debe ser totalmente destruida, como las de los reyes de Israel, porque había una bendición en ella; la del Mesías Los hombres buenos pueden estar afectados por enfermedades; pero para ellos son castigos paternales, y con el apoyo de los consuelos divinos, el alma puede morar tranquilamente, incluso cuando el cuerpo siente dolor. Estar enfermo y pobre, enfermo y solitario, pero especialmente estar enfermo y en pecado, enfermo y bajo la maldición de Dios, enfermo y sin gracia para soportarlo, es un caso muy deplorable. La maldad y la blasfemia hacen que los hombres sean despreciables, incluso a los ojos de aquellos que tienen poca religión. |
Copyright © 1960 by American Bible Society
Autor: Matthew Henry, Traducido al castellano por Francisco la Cueva, Copyright © Spanish House Ministries | Unilit