x

Biblia Todo Logo
idiomas
Bibliatodo Comentarios





«

Salmos 77 - Comentario Bíblico de Matthew Henry

×

Salmos 77

1 A Dios elevo mi voz suplicante;a Dios elevo mi voz para que me escuche.

2 Cuando estoy angustiado, recurro al Señor;sin cesar elevo mis manos por las noches,pero me niego a recibir consuelo.

3 Me acuerdo de Dios, y me lamento;medito en él, y desfallezco.Selah

4 No me dejas conciliar el sueño;tan turbado estoy que ni hablar puedo.

5 Me pongo a pensar en los tiempos de antaño;de los años ya idos

6 me acuerdo.Mi corazón reflexiona por las noches;mi espíritu medita e inquiere:

7 «¿Nos rechazará el Señor para siempre?¿No volverá a mostrarnos su buena voluntad?

8 ¿Se habrá agotado su gran amor eterno,y sus promesas por todas las generaciones?

9 ¿Se habrá olvidado Dios de sus bondades,y en su enojo ya no quiere tener compasión de nosotros?»Selah

10 Y me pongo a pensar: «Esto es lo que me duele:que haya cambiado la diestra del Altísimo.»

11 Prefiero recordar las hazañas del Señor ,traer a la memoria sus milagros de antaño.

12 Meditaré en todas tus proezas;evocaré tus obras poderosas.

13 Santos, oh Dios, son tus caminos;¿qué dios hay tan excelso como nuestro Dios?

14 Tú eres el Dios que realiza maravillas;el que despliega su poder entre los pueblos.

15 Con tu brazo poderoso redimiste a tu pueblo,a los descendientes de Jacob y de José.Selah

16 Las aguas te vieron, oh Dios,las aguas te vieron y se agitaron;el propio abismo se estremeció con violencia.

17 Derramaron su lluvia las nubes;retumbaron con estruendo los cielos;rasgaron el espacio tus centellas.

18 Tu estruendo retumbó en el torbellinoy tus relámpagos iluminaron el mundo;la tierra se estremeció con temblores.

19 Te abriste camino en el mar;te hiciste paso entre las muchas aguas,y no se hallaron tus huellas.

20 Por medio de Moisés y de Aarónguiaste como un rebaño a tu pueblo.

×

Salmos 77

Salmo 77 - Introducción

* Los problemas y la tentación del salmista. (1-10) Se anima a sí mismo al recordar la ayuda de Dios a su pueblo. (11-20)

Salmo 77:1-10

1-10 días de problemas deben ser días de oración; Cuando Dios parece haberse retirado de nosotros, debemos buscarlo hasta encontrarlo. En el día de su problema, el salmista no buscó el desvío de negocios o diversión, sino que buscó a Dios, y su favor y gracia. Aquellos que están bajo problemas mentales, deben rezarlo. Estudió el problema; los métodos que deberían haberlo aliviado lo hicieron pero aumentaron su dolor. Cuando se acordó de Dios, fue solo la justicia y la ira divinas. Su espíritu estaba abrumado y se hundió bajo la carga. Pero no dejes que el recuerdo de las comodidades que hemos perdido nos haga desagradecidos por los que quedan. Particularmente, llamó a recordar las comodidades con las que se apoyó en sus antiguas penas. Aquí está el lenguaje de un alma triste y desierta que camina en la oscuridad; un caso común incluso entre aquellos que temen al Señor, Isaías 50:10. Nada hiere y perfora como la idea de que Dios esté enojado. El propio pueblo de Dios, en un día nublado y oscuro, puede verse tentado a sacar conclusiones erróneas sobre su estado espiritual y el del reino de Dios en el mundo. Pero no debemos dar paso a tales miedos. Que la fe les responda de la Escritura. La fuente turbulenta se despejará nuevamente; y el recuerdo de épocas anteriores de experiencia gozosa a menudo levanta una esperanza que tiende al alivio. Las dudas y los temores proceden de la falta y la debilidad de la fe. El desánimo y la desconfianza ante la aflicción son, con demasiada frecuencia, las enfermedades de los creyentes y, como tales, debemos pensar en ellos con pena y vergüenza. Cuando la incredulidad está trabajando en nosotros, debemos reprimir sus crecimientos.

Salmo 77:11-20

11-20 El recuerdo de las obras de Dios será un poderoso remedio contra la desconfianza de su promesa y bondad; porque él es Dios y no cambia. El camino de Dios está en el santuario. Estamos seguros de que Dios es santo en todas sus obras. Los caminos de Dios son como las aguas profundas, que no se pueden comprender; como el camino de un barco, que no se puede rastrear. Dios sacó a Israel de Egipto. Esto era típico de la gran redención que se realizaba en el cumplimiento del tiempo, tanto por precio como por poder. Si hemos albergado pensamientos dudosos, deberíamos, sin demora, volver nuestras mentes a meditar en ese Dios, que no escatimó a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, para que con él, él pudiera darnos libremente todas las cosas.


»

Biblia al Día (BAD)

Copyright © Editorial "Mundo Hispano" en 1989, inspirada en la versión americana "The Living Bible".

Comentario Bíblico de Matthew Henry

Autor: Matthew Henry, Traducido al castellano por Francisco la Cueva, Copyright © Spanish House Ministries | Unilit

Síguenos en:



Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos