Proverbios 7 - Comentario Bíblico de Matthew HenryProverbios 71 Hijo mío, pon en práctica mis palabrasy atesora mis mandamientos. 2 Cumple con mis mandatos, y vivirás;cuida mis enseñanzas como a la niña de tus ojos. 3 Llévalos atados en los dedos;anótalos en la tablilla de tu corazón. 4 Di a la sabiduría: «Tú eres mi hermana»,y a la inteligencia: «Eres de mi sangre.» 5 Ellas te librarán de la mujer ajena,de la adúltera y de sus palabras seductoras. 6 Desde la ventana de mi casamiré a través de la celosía. 7 Me puse a ver a los inexpertos,y entre los jóvenes observéa uno de ellos falto de juicio. 8 Cruzó la calle, llegó a la esquina,y se encaminó hacia la casa de esa mujer. 9 Caía la tarde. Llegaba el día a su fin.Avanzaban las sombras de la noche. 10 De pronto la mujer salió a su encuentro,con toda la apariencia de una prostitutay con solapadas intenciones. 11 (Como es escandalosa y descarada,nunca hallan sus pies reposo en su casa. 12 Unas veces por las calles, otras veces por las plazas,siempre está al acecho en cada esquina.) 13 Se prendió de su cuello, lo besó,y con todo descaro le dijo: 14 «Tengo en mi casa sacrificios de comunión,pues hoy he cumplido mis votos. 15 Por eso he venido a tu encuentro;te buscaba, ¡y ya te he encontrado! 16 Sobre la cama he tendidomulticolores linos egipcios. 17 He perfumado mi lechocon aroma de mirra, áloe y canela. 18 Ven, bebamos hasta el fondo la copa del amor;¡disfrutemos del amor hasta el amanecer! 19 Mi esposo no está en casa,pues ha emprendido un largo viaje. 20 Se ha llevado consigo la bolsa del dinero,y no regresará hasta el día de luna llena.» 21 Con palabras persuasivas lo convenció;con lisonjas de sus labios lo sedujo. 22 Y él, en seguida fue tras ella,como el buey que va camino al matadero;como el ciervo que cae en la trampa, 23 hasta que una flecha le abre las entrañas;como el ave que se lanza contra la red,sin saber que en ello le va la vida. 24 Así que, hijo mío, escúchame;presta atención a mis palabras. 25 No desvíes tu corazón hacia sus sendas,ni te extravíes por sus caminos, 26 pues muchos han muerto por su causa;sus víctimas han sido innumerables. 27 Su casa lleva derecho al sepulcro;¡conduce al reino de la muerte! Proverbios 7Proverbios 7 - Introducción* Invitaciones para aprender sabiduría. (1-5) Las artes de los seductores, con advertencias contra ellos. (6-27) Proverbios 7:1-51-5 Debemos guardar los mandamientos de Dios con seguridad. No solo, guárdalos, y vivirás; pero, mantenlos como aquellos que no pueden vivir sin ellos. Aquellos que culpan a una caminata estricta y cuidadosa como innecesaria y demasiado precisa, no consideran que la ley debe mantenerse como la niña de los ojos; de hecho, la ley en el corazón es el ojo del alma. Deje que la palabra de Dios habite en nosotros, y así se escriba donde esté siempre a mano para ser leída. Así seremos guardados de los efectos fatales de nuestras propias pasiones y las trampas de Satanás. Que la palabra de Dios confirme nuestro temor al pecado y las resoluciones en contra de él. Proverbios 7:6-276-27 Aquí hay un ejemplo conmovedor del peligro de las lujurias juveniles. Es una historia o una parábola del tipo más instructivo. ¿Alguien se atreverá a aventurarse en tentaciones que conducen a la impureza, después de que Salomón haya puesto ante sus ojos de una manera tan viva y clara, el peligro de incluso acercarse a ellos? Entonces es él como el hombre que bailaría al borde de una roca elevada, cuando acaba de ver otra caída de cabeza desde el mismo lugar. La miseria de los pecadores arruinados comenzó sin tener en cuenta los mandamientos bendecidos de Dios. Deberíamos rezar diariamente para evitar que caigamos en la tentación; de lo contrario, invitamos a los enemigos de nuestras almas a extender trampas por nosotros. Nunca evite el vecindario del vicio. Cuidado con los pecados que se dice que son pecados agradables. Son los más peligrosos, porque con mayor facilidad ganan el corazón y lo cierran contra el arrepentimiento. No hagas nada hasta que hayas considerado bien el final. Si un hombre viviera tanto tiempo como Matusalén, y pasara todos sus días en las más altas delicias que el pecado puede ofrecer, una hora de angustia y tribulación que debe seguir, los superaría con creces. |
Copyright © Editorial "Mundo Hispano" en 1989, inspirada en la versión americana "The Living Bible".
Autor: Matthew Henry, Traducido al castellano por Francisco la Cueva, Copyright © Spanish House Ministries | Unilit