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Jeremías 50:7 - Biblia Nacar-Colunga

7 Cuantos los hallaron los devoraban, y se decían sus enemigos: “No hay delito en ello, porque han pecado contra Yahvé, sede de la justicia y esperanza de sus padres, Yahvé.”

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Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

7 Todos los que los hallaban, los devoraban; y decían sus enemigos: No pecaremos, porque ellos pecaron contra Jehová morada de justicia, contra Jehová esperanza de sus padres.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

7 Todos los que los encontraban los devoraban. Sus enemigos decían: “No hicimos nada malo al atacarlos porque ellos pecaron contra el Señor, quien es su verdadero lugar de descanso y la esperanza de sus antepasados”.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

7 Todo el que los encontraba los devoraba, y sus enemigos decían: No corremos riesgos, pues pecaron contra Yavé, morada segura en el que confiaban sus padres.

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La Biblia Textual 3a Edicion

7 Cuantos los hallaban, los devoraban. Sus enemigos decían: No hacemos mal, porque han pecado contra YHVH, morada de justicia; sí, contra YHVH, esperanza de sus padres.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

7 Cuantos las hallaban las devoraban, y sus enemigos decían: 'No tenemos culpa, porque pecaron contra Yahveh, Yahveh, pastizal de justicia y esperanza de sus padres'.

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Jeremías 50:7
28 Cross References  

Porque tú, ¡oh Señor! eres mi esperanza, mi confianza desde mi juventud.


porque han devorado a Jacob, han asolado sus moradas.


Oración de Moisés, varón de Dios. Señor, tú has sido refugio para nosotros de generación en generación.


El que habita al amparo del Altísimo y mora a la sombra del Todopoderoso,


Estaba yo airado contra mi pueblo, y dejé profanar mi heredad y la entregué en tus manos. Tú no tuviste piedad e hiciste pesar tu yugo sobre los ancianos.


Todas las bestias del campo, venid a córner; todas las fieras de la selva.'


la Siria al este y los filisteos al oeste, que a boca llena devorarán a Israel. Ni con todo esto se aplacará su ira, antes seguirá todavía su mano extendida.


Derrama tu furor sobre las gentes que te desconocen y sobre los pueblos que no invocan tu nombre, que han devorado a Jacob, le han consumido y han devastado su morada.


¡Oh esperanza de Israel, oh Yahvé, su salvador en el tiempo de la angustia! ¿Por qué has de ser como peregrino en el país, como viajero que se para para pernoctar?


Yahvé es la esperanza de Israel; todos los que te abandonan serán confundidos. Los que te dejan en el país se cubrirán de vergüenza , porque dejaron la fuente de aguas vivas, a Yahvé.'


(Era) Israel lo santo de Yahvé, la primicia de sus frutos. Quien de ella comía, pecaba , y caía sobre él la desgracia, oráculo de Yahvé.


Así dice Yahvé de los ejércitos, Dios de Israel: Todavía se dirán estas palabras en la tierra de Judá y sus ciudadades cuando yo haga volver a sus cautivos: “Bendígate Yahvé, sede de justicia, monte de santidad.


En esos días y en ese tiempo, yo suscitaré a David un renuevo de justicia que hará derecho y justicia sobre la tierra.


En esos días será salvado Judá, y Jerusalén habitará confiadamente, y se llamará “Yahvé, justicia nuestra.”


y devorará tus cosechas y tu pan, a tus hijos y a tus hijas. Devorará tus rebaños y tus vacadas, tus viñas y tus higueras; demolerá tus ciudades muradas, en las que confías.'


Aprestaos contra Babel en sus contornos cuantos tendéis el arco. Combatidla, no escatiméis las saetas, porque pecó contra Yahvé.


Israel es una oveja dispersa; leones la dispersaron. Primero la devoró el rey de Asiría; luego Nabucodonosor, rey de Babilonia, le quebró los huesos.'


Así dice Yahvé de los ejércitos: Los hijos de Israel viven en la opresión, y con ellos los hijos de Judá. Cuantos los hicieron esclavos, los retienen, y rehusan soltarlos.


Y así andan perdidas mis ovejas por falta de pastor, siendo presa de todas las fieras del campo.


Y sabrás que yo soy Yahvé cuando te juzgue. He oído todas las injurias que proferiste contra los montes de Israel, diciendo: “¡Destruidos! Nos los dan para que los devoremos”


no hemos hecho caso a tus siervos los profetas, que en tu nombre hablaron a nuestros reyes, a nuestros príncipes y a todo el pueblo de la tierra.


y estoy muy airado contra las naciones que ahora están tranquilas, porque yo estaba un poco airado, pero ellas agravaron el mal.


las que matan los compradores impunemente, mientras sus vendedores dicen: ¡Bendito sea Yahvé, que me ha enriquecido ! sin que los pastores tengan piedad de ellas;'


Pablo, apóstol de Cristo Jesús por el mandato de Dios nuestro Salvador y de Cristo Jesús, nuestra esperanza,


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