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Génesis 20:17 - Biblia Nacar-Colunga

17 Rogó Abraham por Abimelec, y curó Dios a Abimelec, a su mujer y a sus siervos, y engendraron,

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Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

17 Entonces Abraham oró a Dios; y Dios sanó a Abimelec y a su mujer, y a sus siervas, y tuvieron hijos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

17 Entonces Abraham oró a Dios, y Dios sanó a Abimelec, a su esposa y a sus siervas para que pudieran tener hijos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

17 Entonces Abrahán oró por Abimelec, y Dios curó a Abimelec, a su esposa y a sus esclavos, a fin de que pudieran tener hijos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

17 Y Abraham oró a ’Elohim, y ’Elohim sanó a Abimelec, y a su mujer y a sus siervas, las cuales tuvieron hijos,

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

17 Rogó Abrahán a Dios; y Dios sanó a Abimélec, a su mujer y a sus siervas, para que pudieran tener hijos;

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Génesis 20:17
18 Cross References  

Pero Yahvé afligió con grandes plagas al faraón y a su casa por Sarai, la mujer de Abram;'


Ahora, pues, devuelve la mujer al marido, pues él, que es profeta, rogará por ti y vivirás; pero, si no se la devuelves, sabe que ciertamente morirás tú con todos los tuyos.”


Viendo Yahvé que Lía era desamada, abrió su matriz, mientras que Raquel era estéril.


Lo necesario para los holocaustos al Dios de los cielos: novillos, carneros, corderos, trigo, sal, vino y aceite, será entregado, a petición suya, a los sacerdotes de Jerusalén, día por día y sin falta, para que ofrezcan sacrificios de grato olor al Dios de los cielos y rueguen por la vida del rey y la de sus hijos.”


Así, pues, tomad siete becerros y siete carneros e id a mi siervo Job y ofreced por vosotros sacrificios; y Job, mi siervo, rogará por vosotros, y en atención a él no os haré mal, pues no hablasteis de mí rectamente, como mi siervo Job.'


Lejos de los impíos está Yahvé, mas oye la oración del justo.


Yahvé abomina el sacrificio del impío y se agrada en la oración del justo.


Así dice Yahvé, el Santo de Israel y su hacedor: ¿Me vais a interrogar sobre el futuro, sobre mis hijos? sobre la obra de mis manos, ¿me vais a dar órdenes?


Clamó entonces Moisés a Yahvé, diciendo: “Ruégote, ¡oh Dios!, que la sanes.”


El pueblo fue entonces a Moisés y le dijo: “Hemos pecado murmurando contra Yahvé y contra ti; pide a Yahvé que aleje de nosotros las serpientes.” Moisés intercedió por el pueblo,'


y todo cuanto pidierais en la oración lo recibiríais.


Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá.'


Y todos los profetas, desde Samuel y los siguientes, cuantos hablaron, anunciaron también estos días.


Por nada os inquietéis, sino que en todo tiempo, en la oración y en la plegaria, sean presentadas a Dios vuestras peticiones, acompañadas de acción de gracias.


Confesaos, pues, mutuamente vuestras faltas y orad unos por otros para que os salvéis. Mucho puede la oración fervorosa del justo.


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