Biblia Todo Logo
Online nga Bibliya

- Mga paanunsiyo -





Joel 1:2 - Biblia Jünemann Septuaginta en español

2 Oíd esto, los ancianos; y escuchad todos los habitantes de la tierra. ¿Si habrá acontecido cosa tal en vuestros días o en los días de vuestros padres?

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha


Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

2 Oíd esto, ancianos, y escuchad, todos los moradores de la tierra. ¿Ha acontecido esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

Biblia Nueva Traducción Viviente

2 Oigan esto, líderes del pueblo. Escuchen, todos los habitantes de la tierra. En toda su historia, ¿había sucedido antes algo semejante?

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

Biblia Católica (Latinoamericana)

2 ¡Oigan esto, ancianos!, escuchen todos los habitantes del país: ¿Ha sucedido algo semejante en sus tiempos, en tiempos de sus padres?

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

La Biblia Textual 3a Edicion

2 ¡Oíd esto, oh ancianos! ¡Dad oído, moradores todos del país! ¿Aconteció esto en vuestros días, o en los días de vuestros padres?

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

Biblia Serafín de Ausejo 1975

2 Escuchad esto, ancianos, oíd, habitantes todos del país: ¿hubo cosa parecida en vuestros días o en los días de vuestros padres?

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha




Joel 1:2
24 Cross References  

En mucho tiempo, sabiduría; y en mucha vida, ciencia.


Así anciano como antiguo(a), entre nosotros, más grave que tu padre en días.


¿Por qué los impíos viven, y se han envejecido también en las riquezas?


Pues pregunta a generación primera; investiga en linaje de padres.


(Salmo 48) Vanidad de las riquezas y de la vida humana. Degradación del impío. (Para el fin; para los hijos de Coré, salmo) Oíd esto todas las gentes; escuchad todos los que habitan el orbe;


Perdición de los enemigos; sobre todo, de Edom Llegaos, gentes; y oíd, príncipes, oiga la tierra y los en ella, la habitada y el pueblo, el en ella.


Empero traerá Dios sobre ti, y sobre tu pueblo y sobre la casa de tu padre días que aún no han venido desde el día que quitó a Efraín, de Judá: —al rey de los asirios.


Porque grande, aquel día, y no hay semejante, y tiempo estrecho hay para Jacob;


Oíd ahora esto, pueblo fatuo y desacordado; ojos tienen, y no ven; orejas tienen, y no oyen.


Liberación del pueblo de Dios. Resurrección. Gloria de los santos. Fin de la gran desolación. Y por aquella región(a) vendrá Miguel, el ángel, el grande, el que asiste a los hijos de tu pueblo; aquel el día de la tribulación, cual no hubo, desde que nacieron(b) hasta aquel día; y en aquel día será exaltado todo el pueblo que se hallare inscrito en el libro.


Pueblo y sacerdotes de Israel, reconvenidos; y exhortado Judá a escarmentar. Oíd palabra del Señor, hijos de Israel; pues juicio del Señor son los habitantes de la tierra, por esto: porque no hay verdad, ni misericordia ni conocimiento de Dios sobre la tierra;


Israel y Judá amenazados por su infidelidad Oíd esto, los sacerdotes, y atened, la casa de Israel; y la casa del rey escuchad; por esto: porque con vosotros es el juicio, pues lazo os hicisteis para «la atalaya», y como red tendida sobre el Itabirión(a);


Santificad el ayuno; pregonad reunión; congregad ancianos, a todos los habitadores de la tierra en casa de vuestro Dios; y clamad al Señor continuamente.


el día de tinieblas y de caligme; día de nube y niebla. Como el alba, derramado será sobre los montes pueblo mucho y fuerte; semejante a él no ha habido desde el siglo; y, después de él, no se le repetirá hasta años: por generaciones de generaciones.


Castigo del ingrato Israel Oíd esta palabra que habló el Señor sobre vos, casa de Israel, y contra toda tribu que sacó de tierra de Egipto, diciendo:


Castigo del desenfreno e idolatría de Israel. Exhortación a la penitencia. Oíd esta palabra, becerras de la Besanítide, las del monte de Samaria, las que oprimís a los pobres y holláis a los indigentes; las que decíais a vuestros señores: «Dadnos de beber».


Treno a Israel caído. Exhortación a penitencia. Oíd esta palabra del Señor que yo entono sobre vosotros, un treno: «La casa de Israel


Oíd pueblos, mis palabras; y atienda la tierra y todos los que hay en ella; y será el Señor en vosotros, un testimonio; el Señor, desde su casa santa.


Por los pecados de los gobernantes será destruida Jerusalén Y dirá: «Oíd ahora esto, los principados de la casa de Jacob y los restantes de la casa de Israel: ¿No es vuestro el conocer el juicio?


Oíd ahora esto, los príncipes de la casa de Jacob y los demás de la casa de Israel, los que abomináis del juicio y todo lo recto pervertís;


El que tenga orejas para oír, oiga».


Pues habrá entonces tribulación grande, cual no ha habido de principio de mundo hasta lo de ahora, ni habrá, nunca jamás.


Quien tiene oreja, escuche lo que el Espíritu dice a las iglesias: «Al que venciere, daréle a comer del leño de la vida; el que está en el paraíso de Dios».


Sunda kami:

Mga paanunsiyo


Mga paanunsiyo