Online nga Bibliya

Mga paanunsiyo


Ang tibuok bibliya Daang Tugon Bag-ong Tugon




Josué 2:22 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

Los dos espías se fueron a los cerros, y durante tres días estuvieron escondidos allí, hasta que los hombres del rey regresaron. Los habían buscado por todo el camino y no los habían encontrado.

Tan-awa ang kapitulo
Ipakita Interlinear Bible

Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

Y caminando ellos, llegaron al monte y estuvieron allí tres días, hasta que volvieron los que los perseguían; y los que los persiguieron buscaron por todo el camino, pero no los hallaron.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Los espías subieron a la zona montañosa y se quedaron allí tres días. Los hombres que los perseguían los buscaron por todas partes a lo largo del camino pero, al final, regresaron sin éxito.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Los hombres al salir se dirigieron a los cerros. Allí estuvieron tres días mientras los que los perseguían buscaban a lo largo del camino sin encontrar nada.

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Ellos pues caminaron y llegaron al monte, y permanecieron allí tres días, hasta que los perseguidores regresaron, porque quienes los perseguían habían buscado por todo el camino, pero no los habían hallado.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Ellos partieron en dirección a la montaña y allí permanecieron tres días, hasta que volvieron los perseguidores, que los habían buscado por todos los caminos sin dar con ellos.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y ellos fueron, y llegaron a la montaña, y se quedaron allí tres días, hasta que se volvieron los que los perseguían; y los que los perseguían los buscaron por todo el camino, pero no los hallaron.

Tan-awa ang kapitulo
Ubang mga hubad



Josué 2:22
5 Cross References  

Al llegar los hombres de Absalón a la casa, le preguntaron a la mujer dónde estaban Ahimaas y Jonatán. Ella les dijo que habían cruzado el arroyo. Y como los buscaron y no pudieron encontrarlos, regresaron a Jerusalén.


—De acuerdo —respondió ella—. Así se hará. Dicho esto, los despidió y ellos se fueron, mientras ella ataba la soga roja a la ventana.


Entonces los dos espías bajaron de los cerros, cruzaron el río, y volvieron a donde estaba Josué. Luego de contarle todo lo que les había pasado,