En mi lucha contra él, solo cuento con la ayuda de Miguel, que es el ángel que protege a Israel. Ahora yo te voy a explicar lo que dice el libro de la verdad”».
Daniel 8:16 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Entonces escuché la voz de alguien que venía del río Ulai. Esa voz decía: “Gabriel, explícale a este hombre lo que significa el sueño”. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Y oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a este la visión. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces oí una voz humana que exclamaba desde el río Ulai: «Gabriel, dile a este hombre el significado de su visión». Biblia Católica (Latinoamericana) y escuché una voz a orillas del Ulay que le gritaba: 'Gabriel, dale a entender la visión'. La Biblia Textual 3a Edicion Y oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que clamó y dijo: ¡Gabriel, haz que éste entienda la visión! Biblia Serafín de Ausejo 1975 y oí una voz humana en medio del Ulay que gritaba y decía: '¡Gabriel, explícale a éste la visión!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y oí una voz de hombre entre las riberas de Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a este la visión. |
En mi lucha contra él, solo cuento con la ayuda de Miguel, que es el ángel que protege a Israel. Ahora yo te voy a explicar lo que dice el libro de la verdad”».
Entonces me acerqué a uno de los que allí estaban, y le pedí que me explicara lo que significaba el sueño. Y me dijo:
En ese sueño me parecía estar junto al río Ulai, en la ciudad de Susa. Esta ciudad es la capital del reino, y se encuentra en la región conocida como Elam.
En mi sueño un ángel hablaba conmigo, así que le pregunté: —¿Podría usted decirme quiénes son estos hombres? Y el ángel me contestó: —Ahora te lo voy a decir.
4 (8) y le ordenó que me diera este mensaje: «La ciudad de Jerusalén tendrá tanta gente y tanto ganado, que no tendrá murallas.
El ángel le respondió: —Yo soy Gabriel, ayudante especial de Dios. Él me envió a darte esta buena noticia.
Cuando Isabel ya tenía seis meses de embarazo, Dios mandó al ángel Gabriel a Nazaret, un pueblo de la región de Galilea.
Pedro oyó la voz de Dios, que le decía: «¡Pedro, mata y come de estos animales!»
Los hombres que iban con Saulo se quedaron muy asustados, pues oyeron la voz, pero no vieron a nadie.
Porque los ángeles son solamente espíritus que sirven a Dios, y él los envía para ayudar a toda la gente que Dios habrá de salvar.
Cuando me volví para ver quién me hablaba, vi siete candelabros de oro.
«Yo he enviado a mi ángel, para que les diga a las iglesias todas estas cosas. Yo soy el descendiente del rey David; yo soy la estrella que brilla al amanecer.»