26 (27) le contestó: —Su Majestad, como yo no puedo caminar, le pedí a mi sirviente que preparara un burro para que yo lo montara. Pero mi sirviente me engañó,
2 Samuel 9:3 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual Y el rey David le preguntó: —¿Vive todavía algún familiar de Saúl? Dios ha puesto en mi corazón un gran deseo de ayudarlo. Sibá le contestó: —Aún vive un hijo de Jonatán, que no puede caminar. Se llama Mefi-bóset. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 El rey le dijo: ¿No ha quedado nadie de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia de Dios? Y Siba respondió al rey: Aún ha quedado un hijo de Jonatán, lisiado de los pies. Biblia Nueva Traducción Viviente Enseguida el rey le preguntó: —¿Hay alguien de la familia de Saúl que todavía viva? De ser así, quisiera mostrarle la bondad de Dios. Siba le contestó: —Sí, uno de los hijos de Jonatán sigue con vida. Está lisiado de ambos pies. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey le preguntó: '¿Queda todavía algún sobreviviente de la familia de Saúl para que lo trate con bondad digna de Dios?' Siba respondió al rey: 'Todavía queda un hijo de Jonatán que está tullido de ambas piernas'. La Biblia Textual 3a Edicion Y el rey preguntó: ¿No queda ni un hombre de la casa de Saúl para que haga con él misericordia de Dios? Y Siba respondió al rey: Aún queda un hijo de Jonatán, tullido de ambos pies. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo entonces el rey: '¿No existe en la familia de Saúl alguno a quien pueda yo mostrar una benevolencia divina?'. Replicó Sibá al rey: 'Aún vive un hijo de Jonatán, tullido de ambos pies'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el rey dijo: ¿No ha quedado nadie de la casa de Saúl, a quien haga yo misericordia de Dios? Y Siba respondió al rey: Aún ha quedado un hijo de Jonatán, lisiado de los pies. |
26 (27) le contestó: —Su Majestad, como yo no puedo caminar, le pedí a mi sirviente que preparara un burro para que yo lo montara. Pero mi sirviente me engañó,
27 (28) y en lugar de preparar el burro fue a contarle a usted cosas que yo nunca dije. »Pero Su Majestad es como un ángel de Dios, y sé que hará lo mejor.
David le dijo: —No tengas miedo, en memoria de tu padre Jonatán, voy a cuidar de ti. Voy a devolverte todas las tierras de tu abuelo Saúl, y de ahora en adelante comerás en mi mesa.
Ustedes deben ser compasivos con todas las personas, así como Dios, su Padre, es compasivo con todos.»
Él pudo elegir a cualquier pueblo de la tierra, pero eligió a los antepasados de ustedes porque los amaba, y los eligió también a ustedes para que hoy sean su pueblo.