Entonces Jonadab le dijo: Acuéstate como que estás enfermo, y cuando tu padre venga a verte, le dirás: Te ruego que hagas venir a mi hermana Tamar para que me dé de comer, y prepare algo en mi presencia para que yo la vea y ella misma me lo sirva.
Marcos 6:24 - La Biblia Textual 3a Edicion Y saliendo, dijo a su madre: ¿Qué pediría? Y ella dijo: ¡La cabeza de Juan, el que bautiza! Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Saliendo ella, dijo a su madre: ¿Qué pediré? Y ella le dijo: La cabeza de Juan el Bautista. Biblia Nueva Traducción Viviente Ella salió y le preguntó a su madre: —¿Qué debo pedir? Su madre le dijo: —¡Pide la cabeza de Juan el Bautista! Biblia Católica (Latinoamericana) Salió ella a consultar a su madre: '¿Qué pido?' La madre le respondió: 'La cabeza de Juan el Bautista. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Salió ella y preguntó a su madre: '¿Qué pido?'. Ella contestó: 'La cabeza de Juan el Bautista'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y saliendo ella, dijo a su madre: ¿Qué pediré? Y ella dijo: La cabeza de Juan el Bautista. Biblia Traducción en Lenguaje Actual La muchacha salió del salón, fue a donde estaba Herodías, su madre, y le preguntó: —¿Qué podría pedir? Herodías le respondió: —Pide la cabeza de Juan el Bautista. |
Entonces Jonadab le dijo: Acuéstate como que estás enfermo, y cuando tu padre venga a verte, le dirás: Te ruego que hagas venir a mi hermana Tamar para que me dé de comer, y prepare algo en mi presencia para que yo la vea y ella misma me lo sirva.
¿Acaso los siervos de mi tienda no decían: ¿Quién podrá hallar a alguno que no se haya saciado con su° alimento?
Cuando se juntaron contra mí los malignos para devorar mis carnes, mis adversarios y mis enemigos tropezaron y cayeron.
j Los impíos desenvainan la espada y entesan su arco para derribar al pobre y al menesteroso, Para matar a los de recto proceder.
Y ella, instigada por su madre, dice: ¡Dame ahora mismo° la cabeza de Juan el Bautista en un trinchero!°
En aquellos días se presentó Juan el Bautista proclamando en el desierto de Judea,
Y entrando de prisa ante el rey, le pidió, diciendo: ¡Dame ahora mismo la cabeza de Juan el Bautista en un trinchero!°