Online nga Bibliya

Mga paanunsiyo


Ang tibuok bibliya Daang Tugon Bag-ong Tugon




Números 22:16 - Biblia Nacar-Colunga

que, llegados a Balaam, le dijeron: “He aquí lo que te dice Balac, hijo de Sefor: No te niegues a venir a verme,

Tan-awa ang kapitulo
Ipakita Interlinear Bible

Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

los cuales vinieron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac, hijo de Zipor: Te ruego que no dejes de venir a mí;

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Llegaron donde estaba Balaam y le transmitieron el siguiente mensaje: «Esto dice Balac, hijo de Zipor: “Por favor, no permitas que nada te impida venir a ayudarme.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Llegaron donde Balaam y le dijeron: 'Esto dice Balac, hijo de Sipor: ¡Por favor, no te niegues a venir a mi casa,

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

los cuales fueron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac hijo de Zippor: Te ruego que no te niegues a venir a mí,

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Cuando éstos llegaron donde Balaán, le dijeron: 'Así ha hablado Balac, hijo de Sipor: por favor, no dejes de venir a mí,

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Los cuales vinieron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac, hijo de Zipor: Te ruego que no dejes de venir a mí;

Tan-awa ang kapitulo
Ubang mga hubad



Números 22:16
5 Cross References  

y había dado orden a sus criados, diciendo: “Estad atentos, y cuando el corazón de Amnón se haya alegrado con el vino y os diga yo: Herid a Amnón, matadle, y no temáis, que yo os lo mando. Esforzaos, pues, y tened valor.”


En seguida el rey engrandeció a Daniel, y le hizo muchos y grandes dones, y le constituyó gobernador de la provincia de Babilonia, y le hizo jefe supremo de todos los sabios de ésta.


Pero Balac mandó de nuevo a otros príncipes, más en número y más respetables que los primeros,


que yo te colmaré de bienes y haré todo lo que tú me digas; ven, te ruego, a maldecirlo.”


Balac dijo a Balaam: “He mandado a llamarte. ¿Por qué no viniste? ¿No estoy yo acaso en situación de tratarte con la debida honra?”