¿No es la fidelidad, ¡oh Yahvé! lo que buscan tus ojos? Los has castigado, no se han dolido; los destruíste, pero rehusaron aceptar la corrección; tienen la cara más dura que una piedra, no quieren convertirse.'
Lucas 8:6 - Biblia Nacar-Colunga Otra cayó sobre la peña, y, nacida, se secó por falta de humedad. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Otra parte cayó sobre la piedra; y nacida, se secó, porque no tenía humedad. Biblia Nueva Traducción Viviente Otras cayeron entre las rocas. Comenzaron a crecer, pero la planta pronto se marchitó y murió por falta de humedad. Biblia Católica (Latinoamericana) Otra parte cayó sobre rocas; brotó, pero luego se secó por falta de humedad. La Biblia Textual 3a Edicion Otra cayó sobre terreno pedregoso,° y habiendo brotado, se secó° por no tener humedad. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Otro poco cayó sobre la piedra; y, después de nacido, se secó, por no tener humedad. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y otra parte cayó sobre la roca; y nacida, se secó, porque no tenía humedad. |
¿No es la fidelidad, ¡oh Yahvé! lo que buscan tus ojos? Los has castigado, no se han dolido; los destruíste, pero rehusaron aceptar la corrección; tienen la cara más dura que una piedra, no quieren convertirse.'
Y les daré otro corazón y pondré en ellos un espíritu nuevo, quitaré de su cuerpo su corazón de piedra y les daré un corazón de carne,
Os daré un corazón nuevo y pondré en vosotros un espíritu nuevo; os arrancaré ese corazón de piedra y os daré un corazón de carne.'
(11) Porque he aquí que va a dar Yahvé la orden; en las casas grandes abrirá brechas, y grietas en las pequeñas.'
Los que están sobre peña son los que, cuando oyen, reciben con alegría la palabra, pero no tienen raíces; creen por algún tiempo, pero al tiempo de la tentación sucumben.'
Salió un sembrador a sembrar su simiente, y, al sembrar, una parte cayó junto al camino, y fue pisada, y las aves del cielo la comieron.
Y otra cayó en medio de espinas, y, brotando juntamente las espinas, la ahogaron.
mientras se dice: “Si hoy oyereis su voz, no endurezcáis vuestros corazones como en la rebelión.”