El, dejándolo todo, se levantó y le siguió.
Y dejándolo todo, se levantó y le siguió.
Entonces Leví se levantó, dejó todo y lo siguió.
Leví se levantó, lo dejó todo y empezó a seguirlo.
Y dejándolo todo, se levantó y lo seguía.
Y él, dejándolo todo, se levantó y lo siguió.
Y dejándolo todo, se levantó, y le siguió.
Y, atracando a tierra las barcas, lo dejaron todo y le siguieron.
Leví le ofreció un gran banquete en su casa, con asistencia de gran multitud de publícanos y otros que estaban recostados con ellos.