Porque así dice Yahvé de los ejércitos, Dios de Israel: No os dejéis engañar por vuestros profetas que habitan entre vosotros y por vuestros adivinos. No escuchéis su sueño.
Lucas 21:8 - Biblia Nacar-Colunga El les dijo: Mirad que no os dejéis engañar, porque muchos vendrán en mi nombre diciendo: “Soy yo” y “El tiempo está cerca.” No los sigáis. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Él entonces dijo: Mirad que no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo, y: El tiempo está cerca. Mas no vayáis en pos de ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente Él les contestó: —No dejen que nadie los engañe, porque muchos vendrán en mi nombre y afirmarán: “Yo soy el Mesías” y dirán: “El tiempo ha llegado”; pero no les crean. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús contestó: 'Estén sobre aviso y no se dejen engañar; porque muchos usurparán mi nombre y dirán: 'Yo soy el Mesías, el tiempo está cerca'. No los sigan. La Biblia Textual 3a Edicion Él dijo: Mirad que no seáis engañados, porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: ¡Yo soy!° Y: ¡El tiempo está cerca! No vayáis en pos de ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él contestó: 'Mirad que no os dejéis engañar. Porque muchos vendrán amparándose en mi nombre, y dirán: 'Soy yo', y 'El tiempo está cerca'. No vayáis tras ellos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Él entonces dijo: Mirad que no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y: El tiempo está cerca. No vayáis, pues, en pos de ellos. |
Porque así dice Yahvé de los ejércitos, Dios de Israel: No os dejéis engañar por vuestros profetas que habitan entre vosotros y por vuestros adivinos. No escuchéis su sueño.
Desde entonces comenzó Jesús a predicar y a decir: Convertios, porque se acerca el reino de Dios.
Le preguntaron diciendo: Maestro, ¿y cuándo sucederá y cuál es la señal de que estas cosas comiencen a suceder?
Cuando oyereis hablar de guerras y revueltas, no os aterréis; porque es preciso que sucedan estas cosas primero, pero no vendrá luego el fin.'
Yo he venido en nombre de mi Padre, y vosotros no me recibís; si otro viniera usurpando mi nombre, le recibiríais.'
Os dije que moriríais en vuestro pecado, porque, si no creyereis que Yo soy, moriréis en vuestros pecados.
Dijo, pues, Jesús: Cuando levantéis en alto al Hijo del hombre, entonces conoceréis que soy Yo y no hago nada de mí mismo, sino que, según me enseñó el Padre, así hablo.
¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No os engañéis: ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los sodomitas,
Que nadie os engañe con razonamientos vanos, pues por esto viene la cólera de Dios sobre los hijos de la rebeldía.
Que nadie en modo alguno os engañe, porque antes ha de venir la apostasía y ha de manifestarse el hombre del pecado, el hijo de la perdición,
Los hombres malos y seductores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados;'
Carísimos, no creáis a cualquier espíritu, sino examinad los espíritus si son de Dios, porque muchos seudoprofetas se han levantado en el mundo.
Ahora se han levantado en el mundo muchos seductores, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Este es el seductor y el anticristo.
Bienaventurado el que lee, y los que escuchan las palabras de esta profecía, y los que observan las cosas en ella escritas, pues el tiempo está próximo.
Fue arrojado el Dragón grande, la antigua serpiente, llamada diablo y Satanás, que extravía a toda la redondez de la tierra, y fue precipitado en la tierra, y sus ángeles fueron con él precipitados.