El justo reconoce el derecho de los humildes, pero al impío no se le da nada de él.
Lucas 18:2 - Biblia Nacar-Colunga diciendo: Había en una ciudad un juez que ni temía a Dios ni respetaba a los hombres. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 diciendo: Había en una ciudad un juez, que ni temía a Dios, ni respetaba a hombre. Biblia Nueva Traducción Viviente «Había un juez en cierta ciudad —dijo—, que no tenía temor de Dios ni se preocupaba por la gente. Biblia Católica (Latinoamericana) En una ciudad había un juez que no temía a Dios ni le importaba la gente. La Biblia Textual 3a Edicion Les dijo: Había un juez en cierta ciudad que no temía° a Dios ni respetaba° a hombre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Les dijo: 'En una ciudad había un juez que ni temía a Dios ni tenía consideración alguna con los hombres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) diciendo: Había un juez en una ciudad, el cual ni temía a Dios, ni respetaba a hombre. |
El justo reconoce el derecho de los humildes, pero al impío no se le da nada de él.
Los caminos están desiertos, dejaron de pasar los caminantes. Ha roto la alianza, ha aborrecido las ciudades, no hace cuenta de nadie.
Había asimismo en aquella ciudad una viuda que vino a él diciendo: Hazme justicia contra mi adversario.
Por mucho tiempo no le hizo caso; pero luego se dijo para sí: Aunque, a la verdad, yo no tengo temor de Dios ni respeto a los hombres,'
Dijo entonces el amo de la viña: ¿Qué haré? Enviaré a mi hijo amado; a lo menos a éste le respetarán.'
Por otra parte, hemos tenido a nuestros padres carnales que nos corregían y nosotros los respetábamos; ¿no hemos de someternos mucho más al Padre de los espíritus para alcanzar la vida?'