Acaso te escuchen. Y si no te escucharen, pues son gente rebelde, al menos conocerán que hay entre ellos profeta.
Lucas 10:11 - Biblia Nacar-Colunga Hasta el polvo que de vuestra ciudad se nos pegó a los pies, os lo sacudimos, pero sabed que el Reino de Dios está cerca. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Aun el polvo de vuestra ciudad, que se ha pegado a nuestros pies, lo sacudimos contra vosotros. Pero esto sabed, que el reino de Dios se ha acercado a vosotros. Biblia Nueva Traducción Viviente “Nos limpiamos de los pies hasta el polvo de su ciudad para mostrar que los abandonamos a su suerte. Y sepan esto: ¡el reino de Dios está cerca!”. Biblia Católica (Latinoamericana) Nos sacudimos y les dejamos hasta el polvo de su ciudad que se ha pegado a nuestros pies. Con todo, sépanlo bien: el Reino de Dios ha venido a ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Os sacudimos° aun el polvo de vuestra ciudad que se nos pegó a los pies; pero sabed esto: El reino de Dios se ha acercado.°° Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Hasta el polvo de vuestra ciudad que se nos pegó a los pies, lo sacudimos sobre vosotros; pero sabedlo bien: ¡el reino de Dios está cerca!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Aun el polvo que se nos ha pegado de vuestra ciudad, sacudimos contra vosotros: Pero esto sabed, que el reino de Dios se ha acercado a vosotros. |
Acaso te escuchen. Y si no te escucharen, pues son gente rebelde, al menos conocerán que hay entre ellos profeta.
Si no os reciben o no escuchan vuestras palabras, saliendo de aquella casa o de aquella ciudad, sacudid el polvo de vuestros pies.
y si un lugar, no os recibe ni os escucha, al salir de allí sacudid el polvo de vuestros pies en testimonio contra ellos.
En cualquier ciudad en que entréis y no os recibieren, salid a las plazas y decid:
y curad a los enfermos que en ella hubiere, y decidles: El Reino de Dios está cerca de vosotros.
Cuanto a los que no quieran recibiros, saliendo de aquella ciudad, sacudios el polvo de los pies en testimonio contra ellos.
Hermanos, hijos de Abraham, y los que entre vosotros temen a Dios: a nosotros se nos envía este mensaje de salud.
Mirad, pues, que no se cumpla en vosotros lo dicho por los profetas:
Mas Pablo y Bernabé respondían valientemente, diciendo: A vosotros os habíamos de hablar primero la palabra de Dios, mas puesto que la rechazáis y os juzgáis indignos de la vida eterna, nos volveremos a los gentiles.
Ellos, sacudiendo el polvo de sus pies contra aquéllos, se dirigieron a Iconio,
Pero a Israel le dice: “Todo el día extendí mis manos hacia el pueblo incrédulo y rebelde.”
Pero ¿qué dice? “Cerca de ti está la palabra, en tu boca, en tu corazón,” esto es, la palabra de la fe que predicamos.
el cual, siendo esplendor de su gloria e impronta de su sustancia, y sustentando todas las cosas con su poderosa palabra, después de haber realizado la purificación de los pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas,