Huye el malvado sin que nadie le persiga, mas el justo va seguro como cachorro de león.
Juan 7:26 - Biblia Nacar-Colunga Y habla libremente y no le dicen nada. ¿Será que de verdad habrán reconocido las autoridades que es el Mesías? Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Pues mirad, habla públicamente, y no le dicen nada. ¿Habrán reconocido en verdad los gobernantes que este es el Cristo? Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, está aquí hablando en público, y nadie le dice nada. ¿Será que nuestros líderes ahora creen que es el Mesías? Biblia Católica (Latinoamericana) Pues ahí lo tienen hablando con toda libertad y no le dicen nada. ¿Será tal vez que nuestros dirigentes han reconocido que él es el Mesías? La Biblia Textual 3a Edicion Mirad, habla con libertad, y nada le dicen. ¿Será posible° que los gobernantes hayan reconocido que éste es el Ungido? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pues ahí está hablando con toda libertad, y nadie le dice nada. ¿Habrán reconocido realmente las autoridades que éste es el Cristo? Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas he aquí, habla públicamente y no le dicen nada: ¿Habrán en verdad reconocido los príncipes que verdaderamente Éste es el Cristo? |
Huye el malvado sin que nadie le persiga, mas el justo va seguro como cachorro de león.
Expondrá fielmente el derecho, sin cansarse ni desmayar, hasta que establezca el derecho en la tierra; las islas están esperando su ley.'
Enviáronle discípulos suyos con herodianos para decirle: Maestro, sabemos que eres sincero, y que con verdad enseñas el camino de Dios sin darte cuidado de nadie, y que no tienes acepción de personas.
Pilato, convocando a los príncipes de los sacerdotes, a los magistrados y al pueblo, les dijo:
pero los fariseos y doctores de la Ley anularon el consejo divino respecto de ellos no haciéndose bautizar por Él
Sin embargo, aun muchos de los jefes creyeron en El; pero por causa de los fariseos no le confesaban, temiendo ser excluidos de la sinagoga,'
Respondióle Jesús: Yo públicamente he hablado al mundo; siempre enseñé en las sinagogas y en el templo, adonde concurren todos los judíos; nada hablé en secreto,'
Venid a ver a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho. ¿No será el Mesías?
Decían, pues, algunos de los de Jerusalén: ¿No es éste a quien buscan matar?
De la multitud, muchos creyeron en El, y decían: El Mesías, cuando venga, ¿hará más milagros de los que éste hace?
Esto dijeron sus padres porque temían a los judíos, que ya éstos habían convenido en que, si alguno le confesaba Mesías, fuera expulsado de la sinagoga.
Viendo la libertad de Pedro y Juan, y considerando que eran hombres sin letras y plebeyos, se maravillaban, pues los habían conocido de que estaban con Jesús;'
y la mayor parte de los hermanos, alentados en el Señor por mis cadenas, sienten más ánimos para hablar sin temor la palabra de Dios.