Y él respondió: “Cuando aún vivía el niño, ayunaba y lloraba, diciendo: i Quién sabe si Yahvé se apiadará de mí y hará que el niño viva!
Jonás 3:9 - Biblia Nacar-Colunga ¡Quién sabe si se apiadará Dios y se volverá del furor de su ira y no pereceremos! Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y no pereceremos? Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Quién sabe!, puede ser que todavía Dios cambie de parecer, contenga su ira feroz y no nos destruya». Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Quién sabe si Dios se arrepentirá y cesará su enojo, de manera que no nos haga morir?' La Biblia Textual 3a Edicion ¿Quién sabe si desistirá ’Elohim y cambiará de parecer, y se apartará del furor de su ira, y no pereceremos? Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Quién sabe! A lo mejor Dios cambia y se arrepiente, a lo mejor vuelve atrás el ardor de su ira, y no perecemos'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del furor de su ira, y no pereceremos? |
Y él respondió: “Cuando aún vivía el niño, ayunaba y lloraba, diciendo: i Quién sabe si Yahvé se apiadará de mí y hará que el niño viva!
Y se acordó de su alianza con ellos, y por su mucha bondad se apiadó de ellos.
Has perdonado la iniquidad de tu pueblo y has ocultado todos sus pecados.
Vuélvete, ¡oh Yahvé! ¿hasta cuándo?., y ten compasión de tus siervos.
Ahora bien, enmendad vuestros caminos y vuestras obras y escuchad la voz de Yahvé, vuestro Dios, y se arrepentirá Yahvé del mal que había determinado haceros.
se puso a hablar, y dijo: ¿No es ésta Babilonia la grande, que yo, por el poder de mi fuerza y la gloria de mi magnificencia, he edificado para residencia real?
Aborreced el mal y amad el bien y haced justicia en las puertas; quizá Yahvé, Dios de los ejércitos, tenga piedad del resto de José.'
Y agarrando a Jonas, le echaron al mar, y el mar se aquietó en su furia.
Llegóse a él el patrón del barco y le dijo: ¿Qué estás ahí tú durmiendo? Levántate y clama a tu Dios. Quizá se cuidará de nosotros y no pereceremos.
y oró a Yahvé, diciendo: ¡Cómo, Yahvé! ¿no es esto lo que me decía yo estando en mi tierra? Por eso, precaviéndome, quise huir a Tarsis, pues sabía que eres Dios clemente y misericordioso, tardo a la ira, de gran piedad, y que te arrepientes de hacer el mal.
Buscad a Yahvé los humildes de la tierra, que practicáis su ley; buscad la justicia, buscad la mansedumbre; quizá quedaréis al abrigo de la ira de Yahvé.'
Haced, pues, una imagen de vuestros tumores y de las ratas que asuelan la tierra, y honrad al Dios de Israel; quizá deje así de hacer sentir su mano sobre vosotros, sobre vuestros dioses y sobre vuestra tierra.'