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Génesis 9:5 - Biblia Nacar-Colunga

Y ciertamente yo demandaré vuestra sangre, que es vuestra vida, de mano de cualquier viviente, como la demandaré de mano del hombre, extraño o deudo.

Tan-awa ang kapitulo
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Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

»Yo exigiré la sangre de cualquiera que le quite la vida a otra persona. Si un animal salvaje mata a una persona, ese animal debe morir; y cualquiera que asesine a otro ser humano debe morir.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Pero también reclamaré la sangre de ustedes como si fuera su alma. Pediré cuenta de ella a cualquier animal. Y también el hombre deberá responder de la sangre de cualquier hombre, hermano suyo.

Tan-awa ang kapitulo

La Biblia Textual 3a Edicion

pues ciertamente demandaré vuestra sangre así como vuestras vidas, la demandaré de mano° de todo ser vivo, y de mano del hombre, de mano de cualquier hermano° suyo, demandaré la vida del hombre.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Yo exigiré cuentas por vuestra propia sangre, o sea, por vuestras vidas. Las exigiré a todo animal y a todo hombre. Exigiré al hombre cuentas por la vida de su hermano.

Tan-awa ang kapitulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre.

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Génesis 9:5
26 Cross References  

Rubén les dijo: “¿No os advertí yo, diciéndoos: No pequéis contra el joven, y no me escuchasteis? Ved cómo ahora se nos demanda su sangre.”


¿cuánto más ahora, que unos malvados han quitado la vida a un hombre inocente, en su casa, en su lecho, no habré de demandar su sangre de vuestras manos, exterminándoos de sobre la tierra?”


Haz, pues, con él conforme con tu sabiduría y no dejes que sus canas bajen en paz a la morada de los muertos.


Atalía, madre de Ocozías, viendo que había muerto su hijo, levantóse y exterminó a toda la descendencia real.


No se acordó el rey Joás del bien que le había hecho Joyada, padre de Zacarías, y dio muerte a su hijo. Zacarías dijo al morir: “Vea Yahvé y El lo requiera.”


Conspiraron contra él sus servidores, y le mataron en su casa.


El pueblo dio muerte a los que habían matado a Amón, y puso por rey en su lugar a Josías, su hijo.


?ain. Cantad a Yahvé, que mora en Sión; anunciad a los pueblos sus proezas.'


El que hiera mortalmente a otro será castigado con la muerte;'


No vayas sembrando entre el pueblo la difamación; no depongas contra la sangre de tu prójimo. Yo, Yahvé.'


Quien hiera a otro mortalmente, morirá.


Quien matare una bestia, pagúela; pero quien matare a un hombre, será muerto.'


Si le hirió con instrumentos de hierro y se sigue la muerte, es homicida, y el matador será muerto;'


lo mismo si le hirió con piedra en mano capaz de causar la muerte, y ésta se sigue; es homicida y será castigado con la muerte;'


lo mismo si le hirió manejando un instrumento de madera capaz de producir la muerte, y ésta se sigue; es homicida y será muerto.'


o si por odio le golpeó con las manos y se sigue la muerte, el que hirió será castigado con la muerte; es homicida. El vengador de la sangre le matará cuando le encuentre.'


para que caiga sobre vosotros toda la sangre inocente derramada sobre la tierra, desde la sangre del justo Abel hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, a quien matasteis entre el templo y el altar.


El hizo de uno todo el linaje humano, para poblar toda la haz de la tierra; El fijó a los pueblos los tiempos establecidos y los límites de su habitación,'


Pero si uno que odiara a su prójimo le acechare, se echare sobre él y le hiriere mortalmente, y huyera a una de esas ciudades,


los ancianos de la ciudad le mandarán prender y le entregarán en manos del vengador de la sangre para que muera.


Así hizo caer Dios sobre la cabeza de Abimelec el mal que había hecho a su padre, asesinando a sus setenta hermanos;'